En esta serie de artículos, dedicada a identificar cambios institucionales importantes que se produjeron durante ese proceso democrático- popular que duró una década (1944-1954), el anterior escrito a éste de hoy, dio a conocer a los lectores varios de esos cambios, prescritos en artículos de la Constitución de la República, de 1945.
Hoy haremos una pausa y, en vez de continuar la identificación de las disposiciones constitucionales reguladoras de tales cambios institucionales revolucionarios, vamos a comentar el acontecimiento cívico-político, «FESTIVAL CULTURAL DE LA AVENIDA DE LOS íRBOLES», realizado el 20 de octubre del mes pasado.
El FESTIVAL fue propuesto y organizado por el Presidente del Comité íšnico del Barrio San José, de la ciudad capital, a una cuadra al oriente del Mercado Colón, entre 5a y 7a. Calles, y a cuadra y media de la Iglesia San José, por el ciudadano Luis Enrique Celis y por el Colectivo Cultural Pie de Lana y vecinos del barrio, con motivo del sexagésimo sexto aniversario de la Revolución del 20 de Octubre de 1944.
Se solidarizaron al Festival Cultural de la Avenida de Los írboles, entidades industriales y de servicios siguientes: Urbanística -Taller del Espacio Público-, Fábrica Quezalteca, Mapreco, Las Mil Boquitas, Pastelería Holandesa, Tacos Tequila, Impresión Melini y Melini, Serigráfica Aries, y damas y varones de la economía informal, con puestecitos para venta de helados y antojos alimenticios.
El Presidente del Comité íšnico del Barrio – vecino Luis Enrique Celis- meses antes del Festival, había iniciado actividades encaminadas a estimular la confraternidad de los vecinos del Barrio y a reconocer méritos de personas destacadas. Y el Comité íšnico del Barrio designó: «Personajes Destacados» a los siguientes vecinos:
Adrián Reciñes, Alaide Foppa, Alberto Velásquez, Aníbal Chajón Flores, Celso A. Lara Figueroa, Elías Blas, Eloy Amado Herrera, Enrique Arce Behrens, Florentín Ramiro Valladares, Joaquín Orellana, José Alejandro de León, José Aranda Klee, Josefina Alonzo Martínez, Juan B. Carrera Lima, Juan de Dios Montenegro, Juan Aroldo Rodas, Juan José Arévalo Bermejo, Luis Alfonso Alvarado, Luz Octavia Tello, Manuel José Arce, María Mercedes Arrivillaga, María Teresa Martínez, Olga Ruiz Valenzuela de Arce, Rodolfo Klee y a mí, Alfonso Bauer Paiz.
Esa designación fue en septiembre del presente año, habiéndome pedido el Comité que dirigiera la palabra en una reunión de vecinos, convocada en el Salón de Actos del Museo Antropológico Social, situado a la vecindad de la Iglesia Santo Domingo. Mi cometido fue referirme al historial del Barrio, pero yo no me consideré capaz de hacerlo, pues sólo tengo trece años de ser vecino del Barrio. Y, por ello, recurrí al universitario sancarlista, siempre jovial y servicial, Manolo Lera, quien es un erudito de la historia patria. í‰l, inmediatamente me atendió y me facilitó un relato de la importancia histórica del Barrio San José, a partir del siglo XVIII, según el cual la Avenida de los írboles, era la senda colonial, por donde, desde la sede de la Capitanía General del Reino de Guatemala, chapines y centroamericanos, emprendían viaje hacia el Golfo (Bahía de Amatique) en el Mar Caribe. Y, en donde, a hurtadillas, en la nocturnidad, transitaba nuestro fantasmal y legendario, amigo de lo ajeno, Pie de Lana. Barrio residencial de celebridades guatemaltecas, tales como:
José Milla & Vidaurre, Lorenzo Montúfar, Serapio Cruz (Tata Lapo), José Francisco Córdova (Cordovita), redactor del Acta de Independencia del 15 de Septiembre de 1821. Y otros muchos más radicados el siglo pasado, a quienes mencionaremos en el próximo artículo.