Baja ritmo de muertes por cólera


La madre de un niño con cólera morbus, lo atiende en las afueras del Hospital San Nicolás, en el norte de Puerto Prí­ncipe. FOTO LA HORA: AFP Thony BELIZAIRE

Las autoridades de salud haitianas trabajaban hoy para contener la epidemia de cólera luego de que las estadí­sticas mostraran que las nuevas infecciones comenzaban a menguar, mientras el balance de muertes por esta enfermedad supera las 250.


El balance de 253 muertos y 3.115 infectados suministrado el fin de semana por el director general del Ministerio de Salud de Haití­, Gabriel Thimoté, representó un aumento de solo 33 decesos en un perí­odo de 24 horas.

La enfermedad «está limitada a un perí­metro bien definido» en la región norteña de Artibonite y partes de la meseta central, dijo el domingo la ministra de Relaciones Exteriores Marie-Michele Rey a la prensa.

En declaraciones desde Suiza, donde asistí­a a una cumbre de paí­ses francófonos, Rey dijo que por el momento «quienes están en el lugar parecen estar en condiciones de contener la situación».

Pero hay temores de una importante crisis sanitaria si la epidemia se filtra a los escuálidos asentamientos de campaña de Puerto Prí­ncipe, donde cientos de miles de personas viven en terribles condiciones tras ser desplazadas por el terremoto de mediados de enero.

En tanto, Francia anunció el lunes que prepara el enví­o de una misión médica de emergencia para ayudar a combatir el brote de cólera.

«Estamos preparando el enví­o de una misión médica de emergencia que partirá de las Antillas francesas», declaró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Bernard Valero, durante una rueda de prensa sobre los esfuerzos de su paí­s para socorrer a Haití­ ante este nuevo flagelo.

«Desde el anuncio de la epidemia de cólera en Haití­, el Ministerio de Relaciones Exteriores movilizó el conjunto de los servicios correspondientes para tomar la medidas necesarias en estrecho contacto con las autoridades haitianas, las agencias de la ONU, y en especial la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las organizaciones no gubernamentales», agregó Valero.

El cólera se contagia mediante agua y alimento contaminados y podrí­a expandirse como un reguero de pólvora por los asentamientos provisorios, que no cuentan con las mí­nimas condiciones higiénicas.

«Se sabe sin embargo cómo prevenir los decesos causados por el cólera», dijo el domingo Catherine Bragg, coordinadora adjunta de auxilios de urgencia de la ONU, especialmente suministrando antibióticos, purificando el agua y distribuyendo productos de higiene.

Haití­ es el paí­s más pobre de América y fue arrasado el 12 de enero por un sismo que dejó más de 250.000 muertos y 1,5 millones de desplazados. La ya deficiente infraestructura del paí­s quedó destruida.

Hasta ahora no se ha registrado ningún caso de cólera en la vecina República Dominicana pero la crisis sanitaria llevó al gobierno haitiano a «movilizar un plan de urgencia en la zona de la frontera», según la OPS.

El cólera estaba erradicado de Haití­ desde hace más de un siglo y, después de violentas lluvias, reapareció la semana pasada en varias regiones del norte de la isla debido a la mala calidad del agua potable.