La psicosis de atentados es una victoria para Al- Qaeda


Fuerzas de seguridad en Ucrania realizan prácticas de operativos antiterrorismo como forma de prevención. Crí­ticas pesan sobre Europa por haber otorgado demasiada importancia a los posibles atentados. FOTO LA HORA: AFP Alexander KHUDOTEPLY

La psicosis del atentado islamista que se ha apoderado de Europa, con o sin razón, es de por sí­ una victoria para Al- Qaeda y las redes yihadistas, estiman expertos.


Aunque la amenaza de acciones terroristas no debe ser subestimada, por real y permanente, el hecho de ver en primera plana o en las cadenas de información de todo el mundo imágenes de soldados con uniforme de combate que patrullan al pie de la torre Eiffel en Parí­s debe alegrar a los jefes de la red fundada por Osama bin Laden, añaden.

«Toda esta publicidad gratuita, es pan bendito para Al Qaida», confí­a a la AFP Alain Chouet, ex jefe del servicio en la Dirección General de Seguridad Exterior francesa (DGSE).

Al referirse a una de las presuntas fuentes de las recientes alertas, unas revelaciones de un preso alemán de origen afgano detenido en la base estadounidense de Bagram en Afganistán, añade: «No tienen que hacer nada. Les basta que un preso hable en cualquier lugar…»

«No puedes comprobar todo lo que dice, y si alguien mete una granada en una basura en un punto cualquiera de Europa, siempre podrá decir: «Â¿Ven? Se los habí­a avisado»», dice.

La fiabilidad de esta fuente también la pone en duda Richard Barrett, jefe del equipo de vigilancia de las actividades de Al Qaida y talibanes en la ONU.

«Este tipo que habla en Afganistán, no tenemos muchos medios de comprobar lo que dice. Quizás diga (a sus interrogadores) lo que quieren oí­r. Y lo que quieren oí­r es que han parado algo serio», dice.

«Para Al Qaida, es muy eficaz ver que una historia semejante da la vuelta al mundo», precisa Barrett, ex jefe de contraterrorismo del MI6 (servicios secretos británicos).

«Han obtenido la atención del mundo entero, y es lo que buscan. Su objetivo es aterrorizar, no matar. No son estúpidos. Así­ pueden conseguir mucho con casi nada».

Para Magnus Ranstorp, director de investigaciones del Centro de Estudios de Amenazas Asimétricas del Colegio Nacional de Defensa sueco, es necesario tener presente que «Al Qaida mira CNN y Al Jazira: ven el efecto de todo esto».

En asuntos tan sensibles, los dos ex jefes de espí­as advierten contra las posibilidades de manipulaciones, que son numerosas y pueden venir de todos lados: miembros de redes yihadistas que se saben escuchados pueden hablar abiertamente y lanzar falsas pistas a la policí­a; informaciones falsas pueden ser proporcionadas a aprendices de yihadista europeos que se entrenan en las zonas tribales pakistaní­es con la esperanza de que si son capturados al regresar a Francia o Alemania desvelen espantosos proyectos de ataques; responsables polí­ticos en Occidente pueden caer en la tentación de jugar la carta del miedo por motivos electorales u otros.

«Resulta evidente que ahí­ existe en parte una maniobra por parte de los neoconservadores norteamericanos que quieren atacar al presidente Barack Obama en su actitud que pretenden débil frente al terrorismo en la perspectiva de las elecciones a medio mandato en Estados Unidos», estima Alain Chouet.

Para Magnus Ranstorp, «estas advertencias al público deberí­an hacerse en última instancia. Ahora debemos afrontar una amenaza que está dotada de vida propia, que se ha politizado, y es algo muy negativo».

«Si no sucede nada, los gobiernos que han lanzado estas advertencias deberán explicar lo sucedido. No es bueno multiplicar este tipo de alertas».