La bailarina cubana Alicia Alonso, fundadora del Ballet Nacional de Cuba, presentó hoy en Madrid un documental que quiere ser un homenaje a una artista «adelantada a su época», en palabras del bailarín y coreógrafo español Víctor Ullate.
«Alicia Alonso. Para que Giselle no muriera» recorre la vida y obra de la bailarina cubana, que el próximo 21 de diciembre cumplirá 90 años, mostrando su trabajada subida a la cumbre, la creación del Ballet Nacional de Cuba y su pasión por la vida y la enseñanza.
«Lo más importante es haber podido dar algo al ser humano», afirma Alonso en el documental, que gira en torno a una entrevista exclusiva concedida a la televisión pública española.
Alrededor de ella gravitan otras figuras como su marido y director del Museo Nacional de Danza de Cuba, Pedro Simón, el cantautor también cubano Pablo Milanés o la soprano española Montserrat Caballé.
El documental muestra cómo la bailarina, cuando se había convertido en toda una estrella en los años 50 en Estados Unidos, volvió a Cuba tras el triunfo de la revolución castrista en 1959 para crear el Ballet Nacional de Cuba con el apoyo del nuevo régimen.
Las cámaras entran en la sede del Ballet para mostrar cómo Alicia Alonso, «ejemplo de pasión por la belleza, y de tesón», según la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, sigue enseñando a las nuevas generaciones de bailarines.
«Lo que más me gusta es poder transmitir a todos los bailarines lo que he aprendido», afirma Alonso en el documental, que la televisión pública española estrenará el próximo jueves.