El laborismo británico da a conocer hoy en Manchester (noroeste de Inglaterra) a su nuevo líder entre dos hermanos ex ministros, David y Ed Miliband, con la misión de llevar nuevamente al poder al partido relegado hoy a la oposición.
David Miliband, el ex ministro de Relaciones Exteriores de 45 años, pareció durante meses el gran favorito para suceder a Gordon Brown, que renunció en mayo tras un sonado revés electoral.
Pero las encuestas de las últimas semanas muestran que su hermano menor, Ed, de 40 años y ex titular de Energía y Cambio Climático, podría ser finalmente el vencedor de esta reñida contienda fratricida.
Los otros tres aspirantes en liza, los ex ministros de Educación Ed Balls y de Sanidad Andy Burnham, así como la diputada Diane Abbott, sin experiencia de gobierno, están fuera de lo que la prensa ha bautizado como «la guerra de los Miliband».
El último sondeo, realizado por el instituto YouGov para el Sunday Times, daba a Ed una corta ventaja de dos puntos (51% contra 49%), y algunas casas de apuestas también cambiaron en las últimas horas de favorito.
«Todo el apoyo en las últimas 24 horas ha ido hacia Ed. Parece que es el que tiene el impulso», declaró a la AFP el viernes por la tarde David Stevens, portavoz de la casa de apuestas Coral.
David y Ed Miliband representan dos corrientes enfrentadas dentro del laborismo, donde David entró bajo el ala de Tony Blair y Ed de la mano de Brown, a quien se mantuvo fiel hasta el final.
Ed se ha posicionado a la izquierda del partido, desde donde se presenta como el candidato del «cambio» y «de la gente que trabaja», lo que le ha valido el apoyo mayoritario de los sindicatos.
David, más conocido dentro y fuera del Reino Unido, se proclama, desde una posición más centrista, el candidato más experimentado y capaz para «unir» al partido y enfrentarse a David Cameron.
A pesar de su rivalidad, los dos hijos del difunto teórico marxista judío de origen polaco Ralph Miliband y de la intelectual de izquierdas Marion Kozac han multiplicado sus declaraciones de amor fraternal y se han mostrado dispuestos a colaborar con el otro en caso de derrota.
El anuncio del vencedor, en la víspera del inicio del congreso anual del laborismo, culminará un largo y complejo proceso de votación en el que se estima que participaron unos tres millones de personas.