Un portavoz del gobierno alemán declaró hoy que los intereses alemanes han sido preservados en el plan de reestructuración de la compañía aeronáutica europea Airbus y destacó que ello se debe a la unidad de todos los responsables nacionales.
«Hemos conseguido preservar los intereses alemanes», se felicitó Thomas Steg en la rueda de prensa regular de los portavoces del gobierno, antes de citar entre, otros puntos de acuerdo, la distribución en la reducción de plantilla o las posibilidades de futuro para compartir tecnología.
Es algo que se obtuvo «porque todos los responsables del lado alemán estaban unidos y decididos», añadió el portavoz, quien subrayó al importante apoyo político.
Varios miembros del gobierno germano habían reclamado estas últimas semanas compartir de forma más equilibrada la factura social entre Alemania y Francia por miedo a quedar desfavorecidos.
Una fuente sindical de Airbus confirmó hoy mismo a los representantes de los asalariados que su plan de reestructuración prevé 10 mil supresiones de empleo.
La mitad de de estas supresiones corresponden a empresas subcontratadas. Además, se incluye la venta o «cesión a socios de riesgo» de seis plantas en Europa, según la información facilitada por las centrales sindicales.
Los obreros de tres plantas alemanas del consorcio europeo de aeronáutica Airbus (Varel, Nordenham y Laupheim) abandonaron las instalaciones hoy en protesta por los 10 mil despidos y el plan de racionalización anunciado por la empresa, indicó el sindicato metalúrgico IG Metall.
Los trabajadores volverán a trabajar el viernes, según la fuente, que no precisó cuántos trabajaron siguieron la huelga.
«Están hartos», dijo un portavoz del sindicato en referencia al plan de reestructuración de Airbus anunciado hoy.