El 19 del mes pasado se celebró en la Plaza de la Fe, en Managua, esa gloriosa efeméride, con la concurrencia de, por lo menos, medio millón de nicaragí¼enses. En este artículo informaré lo que me sea posible sobre el discurso del presidente Ortega y de su esposa, debido al espacio que tengo asignado por la administración del Diario La Hora, que es limitado, a publicarse hoy, 9 de agosto. Y posteriormente escribiré otro, sobre los logros de la Revolución Popular Sandinista. Anteriormente había publicado el 26 de julio un escrito dedicado a la honrosa distinción de que fui objeto, al condecorarme el presidente Ortega con la medalla de la Orden Rubén Darío y otro publicado el 2 de agosto, titulado «A más de Tres Décadas la R. P. S. sigue Adelante»
Discurso del presidente Ortega
Se refirió: A solidaria carta del presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, lo que hizo en términos fraternales, ya que Nicaragua es parte de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). Saludó y agradeció la presencia del vicepresidente de Cuba, Ramiro Valdés y la de los Presidentes de Osetia del Sur, Eduard Kokoiti y de Abjesia, Serguei Bagapsh, países asiáticos, cercanos a Georgia. Destacó que el acto se realiza en un momento en que el mundo se debate entre amenazas de guerra, hambre, pobreza y crisis económica. No obstante lo cual, reconoció que es innegable que en América Latina hay una realidad: procesos de movimientos sociales y revolucionarios en el Caribe y países de Nuestra América, comprometidos con la justicia social y la libertad, como el ALBA y el de la Revolución Cubana y venezolana. Hizo hincapié en que Nicaragua ha logrado sortear, con éxito, la crisis financiera internacional. Agradeció la colaboración del Cardenal Miguel Obando y Bravo, a través de la Comisión de Verificación, Reconciliación, Paz y Justicia, a la cual preside. Criticó a los gobiernos neoliberales por haber puesto en riesgo la economía del Capitalismo (al cual tanto defienden) por la falta de energía eléctrica, por lo que las empresas no podían producir. La incorporación de Nicaragua al ALBA salvó a Nicaragua de una catástrofe. El golpe militar en Honduras vino a trastocar a toda la región. Pero Nicaragua viene trabajando para lograr que se estabilice. Instó a los pueblos de América a unirse y recordó que ya los países latinoamericanos decidieron en México formar una nueva organización distinta a la OEA, sin la presencia extraña de la potencia del Norte.
Discurso de Rosario Murillo Con gran entusiasmo pronunció sus palabras: Son 31 años de victoria en victoria, de batallas ejemplares. Esta es la Revolución de las mujeres y la Revolución que moviliza el corazón y la fuerza de la juventud. Es la Revolución de campesinos y cooperativistas. Esta es la ruta revolucionaria de productores y emprendedores de caminos y carreteras para el pueblo, para la producción y para el turismo. Esta es la ruta revolucionaria de trabajadores y trabajadoras con derechos restituidos. Esta es la lucha revolucionaria de los pueblos originarios y afro descendientes que han recuperado sus tierras ancestrales y su derecho a la plena autonomía. Esta es la Revolución de maestros y maestras dignas, de médicos, enfermeras y trabajadores de Salud. Esta es la Revolución del crédito y microcrédito. Esta es la Revolución del Programa Productivo Alimentario. Esta es nuestra Revolución en el Siglo XXI, con un modelo único, original de cultura cristiana, tradición solidaria, generosa y conciencia socialista.