El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva llegó hoy a Caracas en una breve visita para analizar la marcha de la cooperación bilateral y tratar con su par Hugo Chávez la crisis entre Venezuela y Colombia a dos semanas de la ruptura de relaciones diplomáticas.
La visita de Lula, quien se acerca al final de su mandato, está enmarcada en las reuniones trimestrales que sostienen ambos mandatarios y estaba fijada con anterioridad a la crisis diplomática que se desató entre los dos vecinos sudamericanos.
En su primera actividad en Caracas, Lula participaba junto a Chávez de una reunión de trabajo que busca dar seguimiento a los proyectos de cooperación adoptados en el marco de la cumbre birregional Sudamérica-Africa (ASA), que se instaló este viernes en la capital venezolana.
Los mandatarios tenían previsto reunirse más tarde de manera privada en el palacio de Miraflores para abordar los asuntos bilaterales y la crisis diplomática con Bogotá, a donde Lula viajará la tarde de este viernes.
Chávez rompió relaciones diplomáticas con Colombia el pasado 22 de julio después que este país insistió ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en sus acusaciones sobre la presencia «activa» de unos 1.5000 guerrilleros dentro del territorio venezolano, lo que Caracas rechaza.
Tras la ruptura, Chávez ordenó a los militares estar en «alerta» y la semana pasada informó haber desplegado unidades militares en la frontera con Colombia ante temores de una posible «agresión armada» por parte de Colombia.
Bogotá ha desestimado la posibilidad de una agresión militar.
En medio de este nuevo conflicto Lula se perfiló como interlocutor para buscar una solución a la crisis, al tiempo que Caracas pidió al bloque regional Unasur que convocara una cita de emergencia, que finalmente se realizó a nivel de cancilleres sin otra resolución que plantear una reunión de presidentes.
La noche del jueves llegó a Caracas el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el ex presidente argentino Nestor Kirchner, quien se reunió con Chávez para dialogar sobre la crisis bilateral. Al término de la reunión no dieron detalles sobre la conversación.
Kirchner seguía este viernes en Caracas y participaba también de la cita ASA.
Lula, por su parte, viajará la tarde del viernes a Bogotá, donde por la noche participará de la cena en homenaje al presidente saliente, Alvaro Uribe, con quien en la última semana protagonizó un ríspido intercambio de declaraciones a propósito de esta crisis bilateral.
El sábado estará presente en la investidura del nuevo presidente colombiano, Juan Manuel Santos, el sucesor de Uribe que iniciará su gobierno en medio del conflicto con su vecino.
Chávez, que ya había congelado las relaciones diplomáticas con Colombia en julio de 2009 a raíz de un acuerdo de cooperación militar entre Bogotá y Washington, ha dicho que espera que las relaciones bilaterales mejoren una vez que Santos asuma el poder, después de haber acusado de «guerrerista» a Uribe.
La víspera, Chávez insistió en que mantiene la «esperanza» de poder «reiniciar una relación transparente» con el nuevo gobierno de Santos, aunque no asistirá a la toma de poder.
El mismo jueves el canciller colombiano Jaime Bermúdez aseguró que su gobierno tiene más pruebas de la presencia de la guerrilla de las FARC en Venezuela, reiterando su llamado a Caracas para que colabore en la lucha contra ese grupo armado.
Estados Unidos ha declarado que las acusaciones de Colombia deben ser tomadas «muy en serio».