El director Federico Fellini y el actor Marcello Mastroianni, genios del célebre filme «La Dolce Vita» resucitaron para una exposición de fotografías en Roma consagrada a la época dorada del cine italiano entre 1950 y 1960, que impuso su estilo inimitable en el mundo entero.
La muestra, que permanecerá abierta hasta el 14 de noviembre, ha sido montada en el estupendo espacio de Los Mercados de Trajano, en el corazón de la Ciudad Eterna y ofrece un recorrido por esos años, sinónimo de lujo y a la vez de decadencia, brillantemente retratados en el célebre filme homónimo de Fellini.
En total 100 fotografías y 100 tapas de revistas, además de videos reproducen la vida de esos protagonistas del milagro económico italiano y de una época marcada por el nacimiento de la prensa rosa y de los «paparazzi», término que acuñó el propio Fellini al denominar a un fotógrafo que inmortaliza la vida secreta de los divos de «paparazzo».
Resalta la belleza de Brigitte Bardot, Claudia Cardinale, Alain Delon, Burt Lancaster, Humphrey Bogart, Lauren Bacall, Grace Kelly, celebridades de las legendarias fiestas nocturnas de Roma, seducidas por una burguesía naciente y una aristocracia perdida.
La exposición está formada por una selección de imágenes en blanco y negro escogidas por Marco Panella en el archivo del Instituto Luce, la mayoría «robadas» a personajes famosos y que permiten descubrir la efervescencia de esos años, catapultados en el imaginario colectivo de un siglo entero.
En las antiguas ruinas del primer centro comercial de la época imperial romana, se pueden admirar tanto momentos íntimos como públicos de los divos del momento.
Sorprende la misteriosa mirada de Anna Magnani, la risa espontánea de Cardinale y el rostro de Alain Delon.
«Era un mundo de ritos y Via Veneto fue el eje central, con sus bares y cafés, inmortalizados por los fotógrafos. Los peinados, trajes, automóviles… eran un modelo para todos», comentó Panella.
«La Dolce Vita representó el renacimiento de Roma tras la tragedia de la Segunda Guerra Mundial, fue una ocasión para la ciudad de volver a tener protagonismo», comentó por su parte Lucrezia Ungaro, directora del museo Mercado de Trajano.
«Evitamos escoger fotos posadas y seleccionamos momentos espontáneos», explicó Panella, quien recordó los escándalos que suscitaron entonces los numerosos divorcios y matrimonios de las celebridades rompiendo así con la visión conservadora de la época.
El matrimonio en Roma en 1949 de los actores estadounidenses Tyrone Power y Linda Christian marca el inicio de esa temporada, seguida por la decisión de la productora MGM en 1950 de rodar «Quo Vadis» en los estudios romanos de Cinecittá, junto con el relanzamiento de los festivales de cine de Venecia y Taormina y los elegantes paseos mundanos a Capri.
La apasionante vida amorosa de Roberto Rossellini e Ingrid Bergman, quienes se enamoraron durante el rodaje del filme «Stromboli» a los pies del homónimo volcán, escandalizó a los italianos que seguían cada capítulo a través de las revistas de corazón.
Para Marco Panella, la Dolce Vita se acabó con el filme «Il sorpasso» (La escapada) de Dino Risi (1962) con Vittorio Gassman y Jean-Louis Trintignant, que clausura «la adolescencia colectiva del italiano de la posguerra, caracterizada por la energía y la voluntad de salir adelante».