Llevará a tribunales la prohibición de corridas


El mundo taurino español y sus aliados polí­ticos intentarán anular la prohibición de las corridas de toros votada ayer en Cataluña (noreste) y prevenir posibles contagios, poniendo el caso en manos de los tribunales.


«Vamos a dar la gran batalla», contra esta medida «inadmisible», dijo el empresario taurino Luis Alvarez, uno de los fundadores y responsables de la Mesa del Toro, asociación profesional de defensa de la tauromaquia.

Según sostuvo, la prohibición que debe entrar en vigor en el 2012 es «inconstitucional» y Cataluña no tiene el derecho de «abolir» las corridas, solamente puede regularlas.

El Partido Popular de oposición (PP, derecha), defensor de la corrida, ya dijo que estudiaba presentar un recurso en tal sentido ante el Tribunal Constitucional, junto con la «Plataforma de la promoción y difusión de la fiesta».

El lí­der del PP, Mariano Rajoy, anunció que intentará hacer adoptar por el Congreso de los Diputados una declaración para declarar la tauromaquia «bien de interés cultural», lo que la protegerí­a de posibles prohibiciones regionales, incluida Cataluña.

Varias regiones autonómicas dirigidas por el PP, sobre todo Madrid y Valencia, anunciaron recientemente su intención de inscribir la tauromaquia en su «patrimonio cultural» para defenderla mejor.

Hay que «blindar» a la tauromaquia contra los intentos de quienes quieren verla desaparecer de España, clamaba el jueves en un editorial el diario de derecha y muy «taurino» La Razón, alertando sobre el «atentado a la libertad».

La lucha será encarnizada entre los pros y anti taurinos durante los 18 meses que separan el voto del parlamento catalán de la aplicación de la prohibición, vigente desde el 1 de enero del 2012, destacaba el jueves el diario El Paí­s.

Según ABC, numerosos mensajes de texto comienzan a circular por España en los que se insta a un boicot de productos catalanes, como una reacción a la medida considerada «anti española», en contra de la «Fiesta nacional».

El mundo taurino en España sólo comenzó a organizarse en los últimos años para defender y promover las corridas, incluso a nivel europeo, con acciones de «lobbying» del parlamento y una reciente exposición.

La prohibición de Cataluña provocará una «toma de conciencia y una movilización» del medio taurino, que no supo defenderse en España tan bien como en Francia, según sostiene el empresario francés Simon Casas, muy activo en la pení­nsula ibérica.

Más allá de una posible anulación o prohibición catalana, los defensores de la tauromaquia quieren asegurarse de que no se extenderá como una mancha de aceite y de que no amenace una actividad que genera varios millones de euros de ingresos anuales y decenas de miles de empleos.

Los grupos de defensa de los animales anunciaron que continuarán sus ofensivas contra la «barbarie» y la «crueldad» de las corridas, esperando aprovechar la dinámica del voto histórico en Cataluña, sobre todo en las Islas Baleares (noreste) y Asturias (noroeste).

Sin embargo, tendrán poco éxito en los bastiones de la tauromaquia española, como Madrid, Andalucí­a, Valencia e incluso el Paí­s Vasco, consideran los medios.

Un contagio en Francia y en Latinoamérica parece también poco probable a corto plazo, según los medios especializados, que temen más por España, debido al envejecimiento del público aficionado y una desafección entre la juventud.