Las apariciones de Penélope Cruz en la pequeña pantalla estadounidense son celebradas con índices de audiencia equiparables a los que recaban las estrellas de Hollywood consagradas.
Así lo demostró «La «perla de Monegrillo», como la bautizó Bigas Lunas en sus inicios profesionales: la entrevista que concedió al programa 60 minutes de la cadena CBS fue lo más visto de la noche del domingo con 7.6 millones de espectadores, según datos de Formula TV.
Sólo unos días antes, se había divulgado la noticia de que se había casado con el actor Javier Bardem. Sin embargo, Cruz evitó hablar sobre su vida sentimental. íšnicamente declaró que su intención ahora es reducir el ritmo de trabajo para centrarse más en su vida personal.
Por lo demás, la recién casada repitió como en un guión las repuestas que ya ha facilitado cientos de veces en otras entrevistas: su infancia en un barrio de Alcobendas (Madrid), su deseo de niña de convertirse, primero, en bailarina y después, en intérprete; cómo se hizo popular con la película «Jamón, jamón» o cómo se presentó a un casting de Pedro Almodóvar y fue en un primer momento rechazada por ser demasiado joven. Reinvindicó la figura de Almodóvar, ligeramente maltratada a su entender en España y la gran amistad que les une.
Asimismo, aseguró que nunca se vio a sí misma guapa o sexy, y que incluso en ocasiones se ha sentido un tanto insegura respecto a su físico.