Cesc Fábregas tiene complicado, de momento, recalar en el equipo de su infancia. El írsenal ha comunicado al nuevo Presidente catalán que no tiene intención de traspasar a su jugador franquicia y menos al Barcelona. El motivo: las formas de la anterior junta directiva encabezada por Joan Laporta que trató de fichar a Cesc de un modo que no ha gustado nada al írsenal.
Ni crédito sindicato, ni con la nueva junta directiva, Cesc Fábregas sigue siendo jugador del írsenal y parece complicado, de momento, que el Barcelona y el club ingés se pongan de acuerdo. Eso, al menos, es el mensaje que se desprende de las palabras del presidente del F. C Barcelona, Sandro Rosell, quien esta mañana ha asegurado que el Arsenal «no quiere negociar el traspaso del jugador catalán por las formas en las que la anterior directiva del Barí§a trató de ficharlo».
Esta pretemporada el fichaje de Fábregas parece posicionarse como el gran culebrón del verano una vez que Cesc, si finalmente se fuera del Arsenal, haya declarado su intención de jugar en el Camp Nou y el Barí§a haya confirmado su interés por el futbolista que con dieciséis años abandonó la Masía.