España, muchas finales y pocos tí­tulos


España juega mañana en Johannesburgo su primera final mundialista, en la que podrí­a lograr un tí­tulo que culminarí­a un largo recorrido histórico plagado de finales con pocos tí­tulos, entre los que siempre faltó el brillo de un Mundial absoluto.


La generación de oro del fútbol español espera, tras proclamarse campeona en la Eurocopa de 2008, donde venció por 1-0 en la final a Alemania, seguir haciendo historia y alzar la Copa Mundial el domingo en el estadio Soccer City de Johannesburgo, donde se enfrentará a Holanda en la final.

«Creo que estamos donde nos merecemos, y ahora queda el último paso, que sabemos que es difí­cil, pero estamos con muchí­simas ganas y muchí­sima ilusión», dijo el jueves el central Carles Puyol.

España logró en 2008 sacarse la espina que tení­a clavada desde la final de la Eurocopa de Francia-1984, cuando un gran saque de falta de Michel Platini se coló por debajo del cuerpo del meta Luis Miguel Arconada en la final del torneo, dando la victoria y el trofeo continental a los anfitriones.

La Furia Roja habí­a logrado antes su primera Eurocopa en 1964 cuando se impuso 2-1 a la Unión Soviética en la final celebrada en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.

Frente a estos éxitos «europeos» de la selección absoluta española, que todaví­a tiene que graduarse en un Mundial, las categorí­as inferiores de la Roja sí­ cuentan con un tí­tulo planetario, el que ganó en 1999 en Nigeria en el campeonato sub-20.

Esa «Rojita», en la que jugaban ya unos jóvenes Iker Casillas y Xavi Hernández, se impuso en la final a Japón 4-0.

La selección sub-20 española volverí­a a llegar a la final del Mundial de Emiratos írabes Unidos 2003, pero en esta ocasión cayó en la final 1-0 ante Brasil.

También los más jóvenes, los Sub-17 españoles, saben lo que es llegar a la final de un Mundial, aunque ellos han seguido una historia más paralela a la selección absoluta, quedándose segundos.

España llegó por última vez a la final de un Mundial Sub-17 en 2007 en el torneo celebrado en Corea del Sur, donde cayó en la tanda de penales ante Nigeria, tras acabar la final 0-0.

Antes, España también habí­a llegado a la final en esta categorí­a en Finlandia-2003 donde, al igual que les ocurrió a los Sub-20 ese mismo año, perdieron ante Brasil, en un encuentro en el que jugaron David Silva y Cesc Fábregas.

España también ha ganado otro tí­tulo universal con su selección de fútbol: los Juegos Olí­mpicos de 1992, que se celebraron en Barcelona.

La selección formada por hombres como el actual entrenador del Barcelona, Pep Guardiola o Luis Enrique, se alzaron con el oro al ganar en la final a Polonia 3-2.

Antes de ese éxito, España habí­a logrado la plata en los Juegos Olí­mpicos de Amberes en 1920, aunque la consiguió de una manera peculiar y es que Checoslovaquia fue descalificada por abandonar la final frente a Bélgica por estar en desacuerdo con el arbitraje.

La medalla de plata y de bronce se jugó en un nuevo torneo entre España, Suecia, Italia, Noruega, Holanda y Checoslovaquia, ganando España la final a Holanda por 3-1, con lo que la recién nacida selección española fue plata y los Paí­ses Bajos bronce.

España conseguirí­a de nuevo la segunda plaza en unas Olimpiadas en 2000 cuando en el torneo de fútbol cayó 3-5 en la tanda de penales, tras acabar la final olí­mpica 2-2.

En ese equipo figuraban hombres como Carlos Marchena, Carles Puyol o Xavi Hernández, que el domingo tendrán ocasión de rubricar la página más gloriosa de su carrera si España gana en la final del Mundial a Holanda.