Kan cae en encuestas


Naoto Kan (C), primer ministro japonés. FOTO LA HORA: AFP Toru YAMANAKA

El primer ministro japonés de centro-izquierda Naoto Kan tratará el domingo de obtener la mayorí­a en la elección senatorial un mes después de su nombramiento, pero según los sondeos perdió más de 20 puntos por sus declaraciones sobre un posible aumento del impuesto al consumo.


Se trata de la primera prueba para el Partido Demócrata de Japón (PDJ), en el poder luego de su abrumadora victoria a mediados del año pasado en la Cámara de Diputados, que puso fin a medio siglo de dominación de los conservadores del Partido Liberal-Demócrata (PLD).

La popularidad del PDJ disminuyó a medida que Yukio Hatoyama, el primer jefe de gobierno surgido de la oposición, se empantanaba en el delicado problema de la mudanza de la base norteamericana que se encuentra en la isla de Okinawa (sur de Japón), y en escándalos de financiación clandestina.

Hatoyama se vio obligado a renunciar y el 8 de junio pasado cedió su puesto a Kan, de 63 años, un ex militante de izquierda que ahora apoya el rigor presupuestario.

El nuevo jefe de gobierno rompió con las generosas promesas de su predecesor y puso en el centro de su programa polí­tico el restablecimiento del equilibro presupuestario y la reducción de la colosal deuda de Japón.

Sin embargo, para llevar a cabo este plan, debe obtener una mayorí­a parlamentaria estable y acabar con el desfile de primeros ministros –cinco en cuatro años– que se han sucedido desde 2006.

Kan, que cuando fue nombrado tení­a más de 60% de popularidad en las encuestas, cometió el error de referirse públicamente a un aumento del impuesto al consumo, que actualmente es de 5%. Su discurso de rigor molestó a los japoneses, que en primer lugar expresaron su descontento en los sondeos con una caí­da de más de 20 puntos en un mes, antes de traducir quizás esa tendencia en las urnas.

La mitad de los 242 escaños del Senado será sometida a la votación del domingo. Para conservar la mayorí­a en la cámara alta, la coalición en el poder, formada por el PDJ y el Nuevo Partido del Pueblo (NPP), un pequeño partido nacionalista, debe obtener como mí­nimo 56 curules en un total de 121.

Kan fijó el objetivo de 54 escaños al PDJ –el número exacto de senadores salientes– con la secreta esperanza de obtener 60, lo que agregado a los 62 ya elegidos le dejarí­a las manos libres para gobernar con el control absoluto de las dos cámaras del Parlamento, algo que no ha ocurrido en las dos últimas décadas.

No obstante, tres encuestas publicadas el viernes por la prensa señalan que la coalición no logrará ni siquiera conservar su mayorí­a actual, exponiéndose así­ a un riesgo de bloqueo parlamentario a menos que consolide alianzas con otros partidos.

«El interés fundamental de los electores es la estabilidad del empleo y su jubilación», señaló Sadafumi Kawato, un profesor de la Universidad de Tokio. «Kan fue ambiguo en su argumentación para justificar un incremento del impuesto al consumo, fundamentalmente en lo que respecta a su papel en la reconstrucción de las finanzas públicas», agregó.