El capitán alemán Philipp Lahm, que no olvida el tumulto que se desató al término de su triunfo ante Argentina por cuartos del Mundial-2006 (1-1 hasta alargue, 4-2 por penales), señaló hoy que esperaba «que esta vez acepten la derrota» los argentinos.
La Albiceleste y la Mannschaft se enfrentan el sábado en Ciudad del Cabo por un boleto a semifinales de Sudáfrica-2010, como hace cuatro años, en idéntica situación.
«Hay tensión, es normal, vamos a jugar un cuarto de final de Copa del Mundo contra uno de los favoritos» al título, afirmó el lateral del Bayern Múnich en conferencia de prensa en Erasmia, lugar de concentración de la Mannschaft.
«Hay que concentrarse en nuestro fútbol y en el partido durante los 90 minutos. Sabemos que los sudamericanos tienen mucho temperamento, son impulsivos, no muy buenos perdedores, pero espero que esta vez muestren que saben aceptar la derrota», apuntó Lahm.
Las declaraciones del capitán germano, que de alguna forma siguen calentando el partido, llegan después de una tormenta mediática que desató su compañero Bastian Schweinsteiger, quien la víspera había criticado el comportamiento de los argentinos en el terreno de juego.
«Los argentinos eran irrespetuosos en el campo de juego», había dicho el volante del Bayern, que estuvo en aquel duelo de Berlín hace cuatro años.
Enseguida, el entrenador albiceleste, Diego Maradona, respondió con una pregunta cargada de intención: ¿Están nerviosos?
Este jueves, tanto Lahm como el mánager de la Mannschaft, Oliver Bierhoff rechazaron, precisando que esos comentarios no eran signo de nerviosismo en el marco de la selección de Alemania.
En marzo pasado, Argentina se tomó un pequeña revancha al vencer al once de Joachim Lí¶w 1-0 en Múnich, en un amistoso de preparación para Sudáfrica-2010.
Para los germanos, enfrentar a Lionel Messi, señalado como el mejor jugador del mundo en la actualidad, también es otro dolor de cabeza. Pero Lahm sabe como puede contrarrestar al astro del Barcelona.
«Lionel Messi es un jugador extraordinario, pero para anular a tal jugador, tenemos que presentarnos como un equipo unido, como lo hicimos contra Inglaterra (4-1)», dijo el defensa.
«Pero no está sólo Messi, no es el único capaz de marcar la diferencia, también están (Carlos) Tévez y Gonzalo Higuaín. Es hora de que podamos mostrar que podemos derrotar a un gran equipo al fin del tiempo reglamentario (90 minutos)», comentó,
«Algo que no hacemos hace mucho tiempo, como Argentina, Brasil o España, mucho más fuertes en este momento que Inglaterra», añadió Lahm.
Pero el capitán de la Mannschaft también piensa que su once debe mantener la humildad para seguir adelante.
«No hay ningún riesgo, sabemos que vamos a enfrentar a uno de los favoritos al título mundial. Nadie puede tomarlo a la ligera. Vamos a estar muy bien preparados para este partido, queremos hacer todo para llegar a semifinales», sostuvo Lahm.
«La clave será jugar en conjunto, hacerlo en equipo, no reaccionar sino actuar. La condición sine qua non para que pasemos frente a un adversario como este, es que cada uno llega a su máximo nivel», concluyó Lahm, que puso un poco más de pimienta a un choque que estaba calentito desde hace cuatro años.
El mánager de Alemania, Oliver Bierhoff, y su capitán Philipp Lahm respondieron al seleccionador albicelete Diego Maradona, que interpretó las críticas de Bastian Schweinsteiger sobre el ánimo de Argentina como signo de nerviosismo, rechazando esa interpretación.
«No estamos nerviosos», aseguraron rotundamente los alemanes hoy.
«Hay tensión antes de este partido, pero no nerviosismo. Pero es normal porque vamos a jugar un cuarto de final de Copa del Mundo contra uno de los favoritos», declaró el capitán alemán Philipp Lahm.
«No estamos nerviosos, Schweinsteiger tampoco. Ya tiene un pasado con mucha experiencia detrás suyo. Estamos concentrados en lo que tenemos que hacer», apuntó Bierhoff, mánager general de la Nationalmannschaft que afronta el sábado a Argentina en Ciudad del Cabo por un boleto en semifinales de Sudáfrica-2010.
El miércoles, Schweinsteiger había declarado en conferencia de prensa que «los argentinos eran irrespetuosos en el campo de juego», en referencia al tumulto generalizado que se provocó tras el duelo de cuartos de final en Alemania-2006, entre ambos equipos (1-1 en alargue, 4-2 por penales Alemania).
Maradona reaccionó a estas declaraciones preguntando a Schweinsteiger si estaba nervioso.
El cuerpo técnico alemán aseguró que no habían charlado del tema con Schweinsteiger luego de sus polémicas declaraciones con las que calentó el partido.
«No hubo conversación entre el «staff» y él tras sus declaraciones. Conocemos a Bastian, su intención no fue desatar una tormenta mediática. Es un jugador muy limpio, no es uno que se queda mucho tiempo en el piso, alguien que da la mano a su adversario», recordó Bierhoff.