La organización indígena Waqib´Kej, manifestó que si el Gobierno no acata la resolución de la CIDH y las observaciones del Relator James Anaya, presentarán a la misma CIDH toda la documentación referente a la problemática con la Mina Marlin. Si en dos meses no se resuelve nada, tomarán medidas de hecho bloqueando carreteras para detener la explotación minera. De igual forma critican a la Corte de Constitucionalidad ya que el 2 de abril presentaron un amparo contra la Mina, que aún no tiene respuesta.
Luego de la visita que hiciera el Relator Especial de los Derechos Humanos, relacionado con temas indígenas, James Anaya, donde concluyó que el Gobierno debe acatar la resolución de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), que indica detener el proceso de explotación en la Mina Marlin I hasta resolver los problemas de contaminación que genera la misma; organizaciones indígenas apoyan las observaciones del Relator y obligarán al Gobierno a acatar dicha resolución.
Indicaron que estarán realizando monitoreos y evaluaciones para que el proceso se encamine debidamente, y que se cumplan las recomendaciones del Relator.
La Coordinación y Convergencia Nacional Maya Waqib´Kej, manifiesta que ya no se dejarán y si el Estado no cumple, «vamos a profundizar la organización, la resistencia y la lucha haciéndole frente a las transnacionales y profundizaremos las denuncias internacionales, igualmente el incumplimiento nos dará la posibilidad para denunciar el carácter racista y excluyente de este Gobierno, pero fundamentalmente nos va a permitir generar todos los elementos políticos y jurídicos para continuar trabajando con la CIDH… el Gobierno ha hecho caso omiso a las medidas cautelares, y es por eso que estamos preparando información para enviarla a la CIDH y posteriormente a la Corte Interamericana, lo que derivará en varias sanciones al Estado» puntualizó Jorge Morales Toj, representante de la organización.
Expresó, de igual manera, que se espera el informe final del Relator, «si el gobierno no reacciona, buscaremos las acciones para presionar al Estado y lamentablemente, la única medida práctica, histórica que nos han dejado los pueblos indígenas, es la movilización las protestas y bloqueos. Y desde ya llamamos a la población guatemalteca que no lo hacemos sólo por nosotros, lo hacemos para proteger el medio ambiente, que al final nos beneficia a todos. Pedimos que nos apoyen.»
Al consultarse con el vicepresidente Rafael Espada, su postura frente a las amenazas que hicieran los grupos indígenas sobre bloqueo de carreteras y manifestaciones, expresó: «Este es un país democrático, que hagan lo que se les antoje».