Yankees resbalan ante los Filis


Plácido Polanco logra una atrapadón en la sexta entrada del partido contra los Yankees, para poner fuera a Nick Swisher tras conectar un batazo de foul. FOTO LA HORA: AFP Jim McIsaac

Los Yankees de Nueva York, campeones de la última serie mundial, patinaron frente a los Filis de Filadelfia, mientras que sus archirrivales, los Medias Rojas de Boston, salieron ayer por la puerta ancha ante los Diamondbacks de Arizona en partido interligas.


En Nueva York, los campeones Yankees sucumbieron 7×1 ante los Filis, precisamente a quienes le ganaron en la Serie Mundial el año pasado por 4-2.

El pitcher vencedor fue Kyle Kendrick (4-2), quien si realizó una excelente faena con siete buenos capí­tulos, en los que diseminó cuatro imparables y una solitaria carrera.

Apoyaron a Kendrick ofensivamente Shane Victorino y Ryan Howard, con dos impulsadas cada uno, el primero también con vuelacerca, y el dominicano Plácido Polanco y el cubano Raúl Ibáñez, con una remolcada per cápita.

La única carrera de los ´Mulos´ fue empujada por el también quisqueyano Robinson Canó, mientras que el revés fue para el veterano Andy Pettitte (8-2).

Con excelente pitcheo del derecho John Lackey y bateo oportuno del venezolano Marco Scutaro y el dominicano David ´Big Papi´ Ortiz, los patirrojos doblegaron a los D´Backs con marcador de 8×5.

Lackey (8-3) caminó seis episodios con suerte, pues en ese tramo permitió ocho hits y cuatro carreras, aunque abanicó a cinco bateadores.

Scutaro se fue de 4-2 con tres impulsadas y Ortiz de 3-2 con una empujada por una jonrón, su número 14 de la temporada.

En Minneápolis, el dominicano Ubaldo Jiménez se convirtió en el primer lanzador en llegar a 13 victorias en la actual temporada, al guiar a los Rockies de Colorado en un triunfo de 5×1 frente a los Mellizos de Minnesota.

Jiménez (13-1) permitió una carrera y ocho hits en ocho sólidos capí­tulos, para dejar su promedio de efectividad en 1.15, y ser el primer pitcher con mejor registro a estas alturas de la temporada desde que Roger Clemens consiguiera un 14-0 en 1986 con los Medias Rojas de Boston.

El dominicano también se convirtió en el segundo serpentinero en los últimos 80 años en llegar a 13 victorias en 14 salidas, después de Clemens (en 1986) y Lefty Gómez, éste con 13-1 en 1932 con los Yankees.

Los toleteros Ryan Spilborghs y Troy Tulowitzki apoyaron a Jiménez con jonrón de dos carreras y triple remolcador de dos, respectivamente, para evitar también la barrida en estos tres juegos interligas.

Cabizbajo se fue del box el abridor dominicano Francisco Liriano (6-4), luego de permitir tres carreras y cinco imparables en siete actos.

En Detroit, con ofensiva de los venezolanos Miguel Cabrera, Magglio Ordóñez y Carlos Guillén, del cubano Alex Avila y del dominicano Ramón Santiago, los Tigres aplastaron a los Nacionales de Washington 8×3.

Cabrera se fue de 5-2 con tres impulsadas, Ordóñez, Guillén y Santiago empujaron una cada uno y Avila con dos remolcadas aseguraron el triunfo al abridor Jeremy Bonderman (3-4).

En tanto, el pitcher derrotado fue el novato puertorriqueño Luis Atilano (5-4), quien no pudo sacar provecho a un cuadrangular del primera base Adam Dunn, su número 16 de la temporada.

Atilano fue castigado con cinco carreras y nueve imparables en solamente cuatro y un tercio de entradas.

En Cincinnati, el lanzador cubano Bronson Arroyo, de los Rojos de Cincinnati, terminó con excelente faena monticular para doblegar 7×1 a los Dodgers de Los Angeles.

El cubano también conectó uno de los tres jonrones de su equipo, siendo los otros dos del canadiense Joey Votto y de Brandon Phillips, todos contra el abridor John Ely (3-4), finalmente el derrotado.

Arroyo (6-3), quien por momentos se mostró descontrolado al otorgar seis boletos, supo salir de atolladeros y diseminó cinco imparables y una solitaria carrera en siete capí­tulos, seis de ellos con ceros adornando el pizarrón.

Los Rojos se fueron a medio juego arriba de los Cardenales de St. Louis en la cima de la División Central de la Liga Nacional, donde estuvieron por última vez el 17 de junio del 2002.

En otros resultados, Cachorros a Atléticos 3×2, Mets a Indios 6×4, Medias Blancas a Piratas 5×4, Rangers a Marlins 6×4, Bravos a Rays 3×1 y Reales a Astros 5×2.

MANNY RAMíREZ De regreso al Fenway Park


Durante ocho temporadas con el uniforme de los Medias Rojas, Manny Ramí­rez fue uno de los bateadores más productivos del béisbol y figura determinante en los únicos dos campeonatos que ha conquistado en los últimos 92 años el club deportivo más querido de Boston y toda la zona de Nueva Inglaterra.

Pero en sus últimos dí­as como residente en el código de área 02216, Ramí­rez perdió apoyo entre los aficionados debido a una disputa pública que el equipo manejó magistralmente en los medios de comunicación.

El viernes, cuando los Dodgers de Los Angeles enfrenten a los Medias Rojas en el primero de una serie de tres partidos, Ramí­rez jugará como visitante en Fenway Park por primera vez desde el 21 de septiembre del 2000, cuando era miembro de los Indios de Cleveland.

La gran pregunta en toda Nueva Inglaterra es: ¿cómo recibirán los fanáticos de Boston a Ramí­rez? ¿Como el héroe que bateó .312 con 274 jonrones y 868 carreras impulsadas como hijo predilecto de la ciudad o el villano que planeó su escape cuando no le garantizaban las dos opciones de $20 millones que contení­a su contrato?

Los programas de radio y televisión, periódicos y páginas de internet de Boston y comunidades aledañas han promocionado suficientemente el regreso de Ramí­rez, quien se marchó como «Manny Being Manny» y reaparece como «Mannywood». De hecho, Ramí­rez resurge en Boston ante una fanaticada que todaví­a sufre la reciente derrota de sus Celtics ante Los Angeles Lakers en la Final de la NBA, lo cual caldeará aún más los ánimos del colectivo.

El público tendrá la última palabra, pero independientemente de la actitud que asuma, lo único que se sabe ciento por ciento de antemano es que a Ramí­rez le importa poco el asunto.

«Cuando te abuchean en la ruta significa que eres un buen pelotero, los fanáticos no abuchean peloteros malos», dijo Ramí­rez hace un tiempo.

Meter aficionados al parque no ha sido problema en los últimos siete años para los Medias Rojas, que llegan al viernes con una cadena de 588 llenos completos desde el 15 de mayo del 2003.

Sin embargo, una histeria colectiva provocada por el retorno de Ramí­rez ha disparado los costos de los pocos tickets disponibles. Ya sea para aplaudirlo o abuchearlo, todos quieren estar allí­ cuando Ramí­rez agote su primer turno.

La alcaldí­a de la ciudad de Lynn, al norte de Boston, planea un homenaje de reconocimiento al toletero dominicano por sus aportes a los Medias Rojas y el deporte de la región en sentido general.

Ramí­rez, quien no comenzó en la alineación de los Dodgers el jueves– bateó de emergente– está metido en una buena racha. Se fue de 12-7 con dos jonrones y cinco carreras impulsadas en sus últimas tres aperturas.

El jardinero batea .295 con 7 jonrones y 33 impulsadas en 42 partidos en el 2010. De por vida es un bateador de .313, 553 jonrones y 1,821 empujadas. En el Fenway Park batea .315 con 141 jonrones y 471 carreras producidas.

Joe Torre, el dirigente de los Dodgers, informó que planea usar a Ramí­rez como bateador designado todo el fin de semana para descansar al pelotero de 38 años. El zurdo venezolano Félix Doubront, quien debutará en Grandes Ligas, será el lanzador de Boston el viernes.

Ramí­rez batea .269 con 11 jonrones y 40 carreras impulsadas contra los Medias Rojas en su carrera.

¿Lo aplaudirán o lo silbarán? La respuesta la sabremos hoy.