Fácil evasión de bloqueadores para delinquir desde la cárcel


Fiscales contra el Crimen Organizado coinciden en que es fácil evadir la señal que bloquearí­a las llamadas telefónicas desde el interior de la cárcel hacia el exterior. LA HORA. ARCHIVO

Los bloqueadores telefónicos instalados en las diferentes cárceles del paí­s cuentan con debilidades, por lo que ese dispositivo de seguridad ha sido evadido por parte de reos, que desde la prisión continúan delinquiendo.

Gerson Ortiz
gortiz@lahora.com.gt

Fiscales contra el Crimen Organizado coinciden en que es fácil evadir la señal que bloquearí­a las llamadas telefónicas desde el interior de la cárcel hacia el exterior, mientras que el Sistema Penitenciario (SP) ya tiene identificadas las áreas débiles.

A criterio de la ex ministra de Gobernación, Adela Camacho de Torrebiarte, el tema abarca la corrupción interna en el SP y considera que este no se va a solucionar mientras esa instancia no logre implementar estrictos controles internos para evitar el ingreso de aparatos celulares para delinquir.

El bloqueo de las llamadas desde las cárceles del paí­s fue adquirido durante la gestión de Camacho de Torrebiarte, con una inversión de Q 21 millones, sin embargo, los reclusos utilizan celulares para delinquir desde sus celdas.

Actualmente existen bloqueadores telefónicos en el Preventivo para Varones de la zona 18, Pavoncito y Pavón, Fraijanes; El Boquerón, Santa Rosa; Cantel, Quetzaltenango; Canadá y el Infiernito, en Escuintla; así­ como en el centro de Rehabilitación de Puerto Barrios, Izabal, y el Centro de Rehabilitación para Mujeres de Santa Teresa.

NO FUNCIONAN

Fiscales contra el Crimen Organizado han establecido que los bloqueadores no son óptimos para impedir el uso de celulares desde las cárceles, debido a la propia infraestructura de las prisiones.

Uno de los fiscales consultados, que pidió no ser citado, explica que el alcance de los bloqueadores es limitado, pues la señal que anula el funcionamiento de los móviles es emitida en lí­nea recta, mientras que los reos han identificado las áreas débiles para estos aparatos.

«La señal es horizontal y en lí­nea recta, pero las cárceles tienen desniveles, agujeros desde donde los reos pueden llamar tranquilamente y planificar o dirigir algún delito», explica el fiscal.

Los investigadores indican que las extorsiones, los secuestros e incluso los asesinatos desde las cárceles se han incrementado debido a que los reos tienen bien identificadas las debilidades de los bloqueadores.

«En realidad los bloqueadores son fáciles de evadir, incluso los reos se pueden aprovechar de la propia estructura del Preventivo de la Zona 18, por ejemplo, donde utilizan como antena las estructuras metálicas de la construcción de los sectores en donde están recluidos para buscar la señal», comentó otro investigador.

CORRUPCIí“N

Camacho de Torrebiarte, en cuya administración se adquirieron los contratos para los bloqueadores telefónicos, consideró que el problema expuesto por los fiscales citados «no es lineal, sino de corrupción interna», comentó.

«El problema va más allá, hay que enfocarse en el tema de la corrupción interna que hay en las cárceles porque si bien se pueden mejorar los bloqueadores mientras sigan ingresando teléfonos a las cárceles nada servirá; los reos consultan la tecnologí­a adecuada para evadir cualquier control», comenta la ex funcionaria.

La ex ministra no considera que la compra de los bloqueadores haya sido una mala inversión, pues considera que el gasto es necesario para minimizar la posibilidad de delitos desde la prisión, sin embargo recomendó al director del SP que no termine de pagar el costo de los aparatos hasta que se logren aplicar al ciento por ciento.

De esa cuenta, la también integrante de la organización Madres Angustiadas propone en el SP la aplicación de «más tecnologí­a y menos gente, mejores portales de entrada y controles internos porque el problema es de corrupción. Es una opción que haya menos personal en las prisiones».

IDENTIFICADAS

Rudy Esquivel, portavoz del SP, informó que las condiciones de vulnerabilidad dentro de las prisiones del paí­s referentes al bloqueo de llamadas ya están identificadas y que esa entidad intenta reforzar las medidas de prevención más que las de represión.

«A través de las requisas sorpresivas en los centros donde hay equipos de bloqueos de llamadas instalados y del fortalecimiento de anillos internos de registro se intenta evitar que ingrese el ilí­cito. No es lo mismo incautar que evitar y en eso nos enfocamos», explicó el vocero del SP.

El vocero del SP añadió que los puestos de control externos e internos sirven para minimizar la intención de ingreso de aparatos telefónicos y reconoció que también esas acciones se complementan con el trabajo de la mejora en la potencia de los bloqueadores.

Según Esquivel, Eddy Morales, director del SP; está trabajando con Alcom, S. A., empresa encargada de la instalación y mantenimiento de los bloqueadores, para que estos funcionen en un ciento por ciento en el bloqueo de la señal.

«Luego de un diagnóstico de cuatro o cinco meses de gestión hay verificaciones de las autoridades de mejorar ese servicio, detectar las debilidades y en base a ello solicitar la ampliación de la cobertura al ciento por ciento; eso forma parte del contrato que dependiendo del nivel de satisfacción puede ser anulado en determinado momento», explicó Esquivel.

DATOS PRESIDIOS


Q249 millones

Es el presupuesto anual del SP.

Q21 millones

Es el monto total de la inversión de los bloqueadores.

Q26 millones

Se gestionan en el Congreso de la República para ampliar el presupuesto del SP.

1

guardia por cada 10 reclusos laboran en el SP actualmente.