El Parlamento Europeo aprobó hoy por una diferencia de más de un centenar de votos el informe que denuncia los abusos de la CIA en la lucha antiterrorista y considera «inverosímil» que ciertos gobiernos europeos no estuviesen al tanto.
Tras una tortuosa votación de 270 enmiendas, el informe, elaborado por el eurodiputado socialista italiano, Giovanni Claudio Fava, fue corregido, principalmente, para retirar las acusaciones a las autoridades de Alemania incluidas en el texto original.
El informe contaba de entrada con el respaldo de los grupos de izquierda y liberal, y con el rechazo o la reticencia del grueso del Partido Popular Europeo, y obtuvo en su versión final 382 votos a favor, 256 en contra y 74 abstenciones.
El documento, que recoge los resultados de doce meses de trabajo de una comisión de eurodiputados, confirma y condena que EEUU haya empleado «sistemáticamente» un programa de «entregas extraordinarias» -detención extrajudicial y encarcelamiento de sospechosos de terrorismo en países terceros- tras el 11 de septiembre de 2001.
Entre esa fecha y finales de 2005, «al menos 1.245 vuelos» operados por la agencia de inteligencia estadounidense hicieron escalas en aeropuertos europeos, si bien no todos estaban implicados en detenciones extrajudiciales, según el informe.
Menciona una decena de casos que afectaron a 21 ciudadanos o residentes de la UE y achaca el conocimiento o connivencia con alguno de ellos a las autoridades de Italia, Reino Unido, Suecia, Austria y, fuera de la UE, Macedonia y Bosnia-Herzegovina.
El texto original también afirmaba que las autoridades alemanas tuvieron «al menos conocimiento» del secuestro del alemán Jaled El Masri y no accedieron a liberar al turco detenido en Guantánamo, Murat Kurnaz, cuando se demostró su inocencia, lo que había avivado la controversia que pesa sobre la actuación del actual ministro de Exteriores germano, el socialista Frank-Walter Stenmeier.
Sin embargo, dos enmiendas impulsadas por los socialistas alemanes y aprobadas por el pleno eliminaron esas afirmaciones.
En el caso de El Masri, el texto final afirma que «hasta la fecha» las investigaciones apuntan que «no hubo implicación de las autoridades alemanas».
En cuanto a Polonia y Rumanía, el pleno suavizó ligeramente las reproches a las autoridades de ambos países por su falta de colaboración, pero mantuvo que la posible existencia de prisiones secretas en su territorio, denunciada por ONG e informaciones periodísticas, no puede afirmarse «ni excluirse».
El texto recoge, sin ser exhaustivo, 336 escalas de vuelos sospechosos en Alemania, 170 en Reino Unido, 147 en Irlanda, 91 en Portugal, 68 en España, 64 en Grecia, 57 en Chipre o 46 en Italia.
En el caso de España, el PE agradece la comparecencia ante la comisión del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel íngel Moratinos, aunque lamenta que «el Gobierno no autorizase» la del director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz.
Asimismo, toma nota de la reciente decisión del Gobierno de desclasificar documentos secretos solicitados por el juez de la Audiencia Nacional que investiga las escalas de supuestos vuelos de la CIA en aeropuertos españoles.
Por otro lado, el informe final mantiene su crítica al alto representante para la Política Exterior, Javier Solana, por las «omisiones» que habría realizado durante su comparecencia.
Con estos elementos, el PE pidió al Consejo de la UE que «presione a todos los gobiernos afectados» para que proporcionen la información de que dispongan y que, si procede, la propia institución comunitaria abra investigaciones al respecto si procede.
También reclama que en los Estados de la UE que no lo hayan hecho ya, emprendan «investigaciones gubernamentales, parlamentarias y/o judiciales» al respecto.
(336) escalas de vuelos sospechosos en Alemania
(170) en Reino Unido
(147) en Irlanda
(91) en Portugal
(68) en España
(64) en Grecia
(57) en Chipre o 46 en Italia.