Pamela Anderson apela al amor de Putin


Hace tiempo que la principal vocación de Pamela Anderson es en su trabajo con la ONG PETA, (las siglas en inglés para la asociación Gente por el trato ético a los animales) y su última tarea consiste en persuadir al primer ministro ruso, Vladimir Putin, para que prohí­ba la importación de pieles de crí­as de foca desde Canadá.


Convencida del amor de Putin por los animales, la actriz le envió una carta, que ha sido publicada por el periódico ruso Izvestia. «A mis amigos de PETA y a mí­ nos alegró verlo recientemente en una serie de fotos que mostraban su amor por los animales», escribió Anderson.

«Como usted ya ha prohibido la matanza de focas bebé en Rusia, le escribo para pedirle que también prohí­ba la importación de pieles de crí­as de foca desde mi nativa Canadá, donde la mayor parte de las focas que son matadas tienen menos de tres meses de edad», continúa la carta.

A pesar de que Putin aún no ha leí­do la petición de la actriz, su portavoz Dmitry Peskov ha declarado al periódico ruso que el primer ministro es «muy sensible» a este tipo de causas. De hecho, al prohibir el año pasado la caza de cachorros de focas, el mandatario ruso condenó la actividad, calificándola de «práctica sangrienta».

Las pieles de foca canadienses están prohibidas desde hace mucho tiempo en estados Unidos, México y la Unión Europea, pero aún se venden libremente en el territorio de Rusia. Pamela Anderson, quien tiene doble ciudadaní­a canadiense y estadounidense, ya habí­a enviado una carta similar a Putin, pero el mensaje se quedó sin respuesta.

«Es un hombre de muy alta moral», ha declarado el politólogo Stanislav Belkovski a la agencia de noticias rusa RIA Novosti. «Pamela Anderson no le interesa. Si en su lugar estuvieran Silvio Berlusconi o Bill Clinton, habrí­an reaccionado tal vez de manera más activa», ha dicho.