Fracasan búsquedas de cajas negras


La tercera fase de búsqueda de las cajas negras del Airbus A330 de Air France, que cayó al Atlántico con 228 personas a bordo el pasado 1 de junio, concluyó hoy sin éxito, pero las familias de las ví­ctimas exhortaron hoy a los investigadores a seguir buscándolas.


«Las búsquedas terminaron ayer lunes. El naví­o va camino al puerto de Praia en Cabo Verde. Los equipos y el personal serán desmovilizados el 27 de mayo», declaró el martes a la AFP el director de la Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA), Jean-Paul Troadec.

Las familias de las ví­ctimas del accidente del vuelo Air France AF447 Rí­o de Janeiro-Parí­s reclamaron de inmediato el lanzamiento, «lo más rápidamente posible», de una nueva fase de búsquedas, pese al fracaso de la tercera fase, anunciado este martes.

«Las familias de las ví­ctimas siguen un año después del accidente bandeadas entre los anuncios y los desmentidos. Una gran confusión reina entre la Marina nacional y la BEA», declaró Jean-Baptiste Audousset, presidente de una asociación de familias de ví­ctimas.

«Reclamamos una transparencia total y el lanzamiento, lo más rápidamente posible, de una nueva fase de búsquedas ya que es bastante extraordinario que al cabo de un año, sólo se haya encontrado 3 o 4% del avión», pidió Audousset.

Según Audousset, las familias de las ví­ctimas habí­an reclamado el 5 de noviembre, durante un encuentro con el secretario de Transportes, Dominique Bussereau, la presencia de un representante de las familias en las búsquedas.

«Eso nos fue negado con el pretexto de que la BEA es la mejor del mundo, pero para nosotros sigue siendo de actualidad con el fin de gozar de la transparencia que nos fue prometida poco después del accidente», explicó.

El brasileño Nelson Marinho, presidente de la Asociación de familias de las ví­ctimas del vuelo AF447 Rí­o-Parí­s, que agrupa más de cien familias, deploró vivamente ese fracaso.

«Con todas las informaciones y la tecnologí­a de que disponen, no han hallado las piezas gigantescas como el fuselaje del avión; no quieren encontrarlas», acusó Marinho en declaraciones a la AFP en Rí­o.

Por el momento, ninguna decisión ha sido tomada por la BEA sobre una eventual continuación de las búsquedas, lo que depende del balance de las operaciones.

«Hemos decidido hacer un balance de todas las operaciones de búsquedas que comenzaron hace prácticamente un año (…). Vamos a reunir a todos aquellos que se han asociado a nosotros (…). Se necesitará al menos un mes o dos para que seamos capaces de hacer este balance y eventualmente tomar la decisión de continuar las búsquedas», explicó Troadec, recalcando que esta decisión no le incumbí­a únicamente a la BEA.

«Estamos en una zona donde las corrientes son mal conocidas, por donde pasan pocos barcos, donde los fondos son muy profundos, del orden de los 4.000 m, y accidentados (…) el montaje de esas expediciones es bastante pesado y muy complejo», insistió.

Los investigadores han llevado a cabo ya tres fases de búsquedas, dos en 2009 tras el accidente y la tercera que comenzó a fines de marzo, hasta el lunes.

En total, unos veinte millones de euros (24 millones de dólares) han sido invertidos para tratar de encontrar los restos del avión y las cajas negras.

La Marina francesa habí­a anunciado a comienzos de mayo que las cajas negras del aparato habí­an sido localizadas en una zona a cinco kilómetros de radio en el Atlántico, pero el martes la BEA anunció que esa tercera fase de búsquedas se habí­a saldado con un fracaso.

El 1 de junio de 2009, el A330 de Air France que viajaba entre Rí­o y Parí­s se estrelló en el Océano Atlántico, causando 228 muertos, por una razón aún desconocida.