La UE y México prevén reforzar su cooperación para hacer frente al crimen organizado en el país norteamericano y en América Central, durante la cumbre que se celebrará el domingo en Comillas (norte de España) y que marcará el décimo aniversario de su Acuerdo de Asociación.
Tras 50 años de relaciones diplomáticas, la Unión Europea (UE) y México, socios estratégicos desde 2008, lanzarán durante su cumbre un plan de acción conjunto que abarcará todos los asuntos de interés mutuo, desde la migración y los derechos humanos hasta temas globales como el cambio climático.
El dirigente mexicano Felipe Calderón presidirá el encuentro junto al presidente de la UE, Herman Van Rompuy, acompañados del jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
Los mandatarios acordarán especialmente «lanzar un diálogo» con miras a reforzar la seguridad en la frontera de México con Estados Unidos, donde el gobierno mexicano está enzarzado en una larga lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, indicaron fuentes europeas en Bruselas.
En ese diálogo, explorarán además cómo apoyar a Guatemala, Honduras y El Salvador, países de tránsito de la droga procedente de países sudamericanos en dirección a Estados Unidos, y donde la cooperación de México es «clave», según las fuentes.
El encuentro del domingo está llamado a «estudiar al más alto nivel las pistas sobre cómo la UE puede cooperar con México, a través del intercambio de información y de experiencias», dijeron.
«Europa no actúa al estilo estadounidense, no vamos a enviar helicópteros» a la frontera norte de México, pero en cambio se plantea, por ejemplo, establecer una colaboración entre la policía y la fiscalía mexicanas y la agencia europea Europol, dijeron fuentes de la Comisión Europea.
Los dirigentes pasarán revista además a la situación macroeconómica mundial, insistiendo en la importancia de incrementar la supervisión financiera, al tiempo que los europeos aportarán su apoyo a México de cara a la conferencia internacional contra el cambio climático que se celebrará a fines de año en Cancún, según las mismas.
Esta será la quinta cumbre que Europa y México mantendrán desde la entrada en vigor de su Acuerdo de Asociación en 2000, que creó una zona de libre comercio, y la primera desde que son socios estratégicos, un estatuto que la UE ha establecido con nueve países en el mundo, entre éstos, Brasil.
Este es el motivo por el que el encuentro se celebrará en Comillas, a diferencia del resto de reuniones subregionales que la UE mantendrá entre el lunes y el miércoles en Madrid, al margen de la cumbre eurolatinoamericana el martes en la capital española.
«Debido al estatuto de México respecto a Europa, había que diferenciar esa cumbre», explicaron las fuentes de la Comisión Europea.
Por otro lado, España, que ejerce la presidencia semestral de la UE, trabaja para «que haya una referencia» a la necesidad de luchar contra las violaciones de los derechos de la mujeres y los asesinatos de mujeres en las declaraciones de las cumbres eurolatinoamericana y con México, país afectado por esta lacra, según la cancillería.
Al margen de la cumbre en Comillas, Calderón y Zapatero se reunirán bilateralmente el domingo por la mañana en la localidad cercana de Santillana del Mar, donde el presidente mexicano recibirá además el Premio Nueva Economía Fórum 2009 al Desarrollo Económico y la Cohesión Social.
El sábado, España y México protagonizarán un simbólico intercambio de banderas, que se conservan actualmente en museos de Madrid y México D.F., coincidiendo con el bicentenario de la independencia del país latinoamericano de la corona española.
España cederá a México una bandera que fue tomada a las tropas del Cura Hidalgo en 1811 a cambio de las cuatro enseñas arrebatadas a la expedición del General Barradas en 1829, en su intento de tomar la ciudad de México, informó el gobierno español.