El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy un recorte de 600 millones de euros (761 millones de dólares) en ayuda al desarrollo entre este año y el próximo, como parte del severo paquete de medidas para bajar el déficit público.
Zapatero toma esta medida después de haber asegurado durante la crisis, desde finales de 2008, que las medidas de ahorro no afectarían a la ayuda al desarrollo.
«Lo que se ha adoptado hoy son medidas difíciles pero necesarias», afirmó la secretaria de Estado de Cooperación, Soraya Rodríguez, a los medios tras conocerse la noticia.
«Son 600 millones en dos años, por lo que se trata de una reducción de 300 millones» este año, puntualizó la secretaria de Estado, tras un encuentro con los medios para presentar el próximo encuentro ministerial sobre cooperación y desarrollo que tendrá lugar en Madrid el domingo.
España, que en 2009 ejecutó un total de 4.883 millones de euros en ayuda al desarrollo, tenía presupuestado para 2010 un monto de 5.192 millones de euros, de los que se tendrá que deducir los 300 millones recortados para este año en materia de ayuda al desarrollo, precisó Rodríguez.
La secretaria de Estado no estuvo en medida de precisar cómo se realizarán los recortes, pero aseguró que «nuestros compromisos con Haití no se van a reducir en un solo euro», al igual que los proyectos «en los países de menor renta».
«Es una medida dura y para una política en la que presidente (Zapatero) tiene un gran compromiso», añadió la secretaria de Estado, quien recordó que en 2009 España fue el sexto mayor donante de la comunidad internacional.
Soraya Rodríguez recordó que en el momento de la llegada al poder de los socialistas en 2004, la ayuda al desarrollo suponía el 0,23% del PIB, que se ha ido aumentando hasta el 0,47% en 2009 «superior a la media de la UE que es del 0,42%».
Los países de la UE se habían puesto como objetivo destinar el 0,7% del PIB a ayuda al desarrollo en 2015, en el marco de los Objetivos del Milenio, pero España había apostado por alcanzar ese objetivo en 2012, aunque tras estos recortes «indudablemente habrá que reprogramar el calendario», explicó Soraya Rodríguez.
«El objetivo del 0,7% es posible pero hay que reprogramar», añadió, asegurando que este objetivo «es irrenunciable».