Irak vivió el lunes su día más sangriento desde comienzos del año, con la muerte de al menos 68 personas, mientras que 250 quedaron heridas, en atentados contra obreros de una fábrica y las fuerzas de seguridad.
Irak vivió el lunes su día más sangriento desde comienzos del año, con la muerte de al menos 68 personas, mientras que 250 quedaron heridas, en atentados contra obreros de una fábrica y las fuerzas de seguridad.