Prevén crecimiento de 4,2% mundial


Olivier Blanchard, del FMI, ofrece sus previsiones en la sede de Washington. FOTO LA HORA: AFP Stephen Jaffe

El FMI revisó hoy al alza su previsión de crecimiento mundial a 4,2% pero advirtió sobre los riesgos que aún pesan sobre la recuperación, en particular la deuda pública de los paí­ses desarrollados y los desequilibrios en los flujos de capital.


Tras retroceder 0,6% en 2009, el Producto Interior Bruto (PIB) del planeta deberí­a crecer 4,2% este año, una previsión que el Fondo Monetario Internacional (FMI) calificó de «similar» a la precedente de 3,9% en enero.

«La recuperación de la economí­a mundial evoluciona mejor que lo previsto», señaló el Fondo.

«La actividad se desarrolla a ritmos diferentes, tí­midamente en los paí­ses desarrollados, pero vigorosamente en la mayor parte de los paí­ses emergentes y en desarrollo», indicó.

El crecimiento deberí­a ser muy lento en Europa (1,0% en la zona euro, 1,3% en el Reino Unido) y en Japón (1,9%). Pero será impulsado a nivel mundial sobre todo por los paí­ses emergentes y en desarrollo (6,3%), con Asia a la cabeza (8,7%, entre los cuales 10% corresponderá a China)

En este contexto, el FMI se inquieta por las consecuencias sobre los flujos de capital.

«Las estimaciones de los economistas del FMI muestran que los desequilibrios de las cuentas corrientes aumentaron sensiblemente con la recuperación del comercio mundial, la mejora en las condiciones de financiamiento y la estabilización de los precios de las materias primas en niveles muy elevados», subrayó la institución.

«Las monedas de un cierto número de economí­as asiáticas continúan subvaluadas, en proporciones considerables en el caso del yuan, mientras que el dólar y el euro se mantienen fuertes con relación a sus fundamentos de mediano plazo», estimó el FMI.

Por otro lado, el Fondo insiste sobre otros riesgos por el crecimiento mundial: el aumento de la deuda pública de los paí­ses desarrollados.

Aconsejando mantener las polí­ticas de relanzamiento en 2010, el FMI estima que «un gran número de estos paí­ses deben además adoptar de urgencia estrategias creí­bles a mediano plazo para limitar el endeudamiento público y enseguida llevarlos a niveles más prudentes».

«Los riesgos vinculados a la deuda de los Estados podrí­an deprimir la actividad por todo un conjunto de razones», señaló el informe.

«Los ratios elevados de deuda podrí­an dificultar la flexibilidad presupuestaria, provocar una alza de las tasas de interés generalizada en la economí­a, acrecentar la vulnerabilidad de las economí­as en dificultades presupuestarias, y comprimir el crecimiento», enumeró el Fondo.

Por último, el FMI llamó a los gobiernos a «reparar y reformar el sector financiero» para terminar con las lagunas en la regulación, y a «sostener la creación de empleos y a los desempleados».

La tasa de desempleo deberí­a mantenerse cerca del 8,5% en los paí­ses desarrollados hasta fines de 2011.

CHINA Moneda


El Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró «esencial» que China deje que su moneda, el yuan, se fortalezca, y estimó que la potencia asiática volverá a tener en 2010 y 2011 dos años de fuerte crecimiento económico, en sus previsiones publicadas hoy.

El FMI afirma que el yuan está «claramente» subvaluado, apuntalando la presión para que las autoridades chinas permitan una valoración de su divisa a fin de dinamizar el comercio internacional mediante un aumento de las importaciones del paí­s más poblado del planeta, que le disputa a Japón el rango de segunda economí­a mundial.

Esa apreciación es «esencial, a causa del importante papel de China en el mercado mundial», señala el FMI en sus previsiones semestrales.

El Fondo evalúa que el PIB chino crecerá un 10% en 2010 y un 9,9% en 2011 y considera que un yuan más fuerte será beneficioso tanto para China como para dinamizar la recuperación de la economí­a mundial.

ESTADOS UNIDOSg Recuperación y riesgo


La economí­a estadounidense crecerá este año a una inesperada tasa de 3,1%, señaló este miércoles el Fondo Monetario Internacional (FMI), que no obstante advirtió que Washington debe esforzarse para sostener la frágil recuperación ante su enorme deuda.

El FMI indicó que «la recuperación está en proceso» en la principal economí­a del mundo, sobre todo impulsada por el gasto gubernamental, al revisar al alza en medio punto porcentual el crecimiento de Estados Unidos para 2010.

Pero el ente multilateral advirtió en su informe semestral de previsiones económicas que aunque la demanda «suave» de los consumidores y empresas propulsa la recuperación, el estí­mulo del gobierno no puede prolongarse indefinidamente por los elevados niveles de la deuda.

El déficit fiscal se ha disparado desde que comenzó la crisis por la decisión del gobierno de inyectarle billones de dólares a la economí­a para mantenerla a flote.

Este año se espera que el déficit sobrepase el billón de dólares.

«Estas perspectivas muestran el delicado trabajo que se debe acometer con respeto a la polí­tica fiscal: la necesidad de fomentar el crecimiento ahora y asegurar la estabilidad fiscal en el mediano plazo», señaló el Fondo.

El FMI dijo que el estí­mulo ha funcionado, siendo responsable de hasta 1% del crecimiento del PIB en 2009, y que cuando se vaya eliminando progresivamente la economí­a se resentirá.

«Las eliminación de la polí­tica de estí­mulo le restará al crecimiento, que se moderará a 2,6% en 2011», estimó el Fondo.

Un gasto limitado es una opción que debe seguir siendo considerada, tomando en cuenta que la recuperación estadounidense sigue restringida por el alto desempleo, la falta de crédito y un mercado inmobiliario deprimido.

«Dadas las actuales debilidades y riesgos en los mercados laboral e inmobiliario, se puede considerar un adicional apoyo canalizado hacia esos sectores», dijo el Fondo.

La crisis produjo unos ocho millones de nuevos desempleados en Estados Unidos y una de cada diez personas en el mercado laboral sigue sin un puesto de trabajo.

El FMI advirtió que debe implementarse un «plan creí­ble» para sanear las finanzas del gobierno.

«Cuando la recuperación esté en proceso de manera sólida, la consolidación fiscal debe ser una prioridad», señaló.

«Dado el tamaño del desbalance fiscal estadounidense, un plan creí­ble para la sostenibilidad fiscal necesita acompañar a cualquier medida que limite el riesgo de un incremento de las tasas de interés, que afectarí­an el crecimiento», agregó el Fondo.