Polonia rinde un grandioso homenaje a las ví­ctimas del avión presidencial


Vista panorámica de la plaza y el Castillo Real de Varsovia, donde se preparan para rendir honras fúnebres al Presidente, su esposa y otros funcionarios que perecieron en el accidente aéreo del fin de semana pasado. FOTO LA HORA: AFP Zborowski

Decenas de miles de polacos se congregaron hoy en una inmensa plaza de Varsovia en memoria del presidente Lech Kaczynski y de las demás 95 ví­ctimas del accidente del avión presidencial que se estrelló hace una semana en Rusia.


Las sirenas ulularon y las campanas de las iglesias sonaron en todo el paí­s hoy a las 08:56 horas locales, hora exacta de la catástrofe aérea ocurrida siete dí­as antes en Smolensk, en el oeste de Rusia.

Luego, la ceremonia se inició a mediodí­a local en la plaza, donde se elevaba un altar en el mismo lugar donde el papa Juan Pablo II celebró una memorable misa durante su primera peregrinación a la Polonia comunista, en 1979.

Una simple cruz blanca fue erigida, con un enorme fondo negro con las fotos de todas las ví­ctimas de la catástrofe.

El Primer ministro Donald Tusk, el ministro de Relaciones Exteriores Radoslaw Sikorski, el ex presidente y fundador del movimiento anticomunista Solidaridad Lech Walesa, así­ como el ex presidente Alexander Kwasniewski, estaban presentes.

«Â¡Semejantes cosas no ocurren jamás, son imposibles!» exclamó Tusk. «Es la mayor tragedia en la historia de Polonia desde la Segunda Guerra mundial», añadió.

El hermano gemelo de Lech Kaczynski, Jaroslaw, fue aplaudido a su llegada con la hija de la pareja presidencial, Marta.

El papa Benedicto XVI transmitió un mensaje de «solidaridad» al pueblo polaco, leí­do por su nuncio apostólico durante la imponente ceremonia.

«El Santo Padre me honró al representarlo ante ustedes en estas difí­ciles circunstancias, para expresarles su solidaridad y sus sentimientos paternales», dijo el nuncio, el arzobispo Jozef Kowalczyk, al dirigirse a una multitud de unas 100.000 personas congregadas en la plaza.

Los funerales del presidente y de su esposa, también fallecida en el accidente, se celebrarán el domingo en Cracovia. Al menos 80 delegaciones extranjeras, entre ellas las de los presidentes estadounidense Barack Obama y ruso Dimitri Medvedev, deben asistir a estos funerales, al que ya se acreditaron más de 3.300 periodistas polacos y extranjeros.

Sin embargo las nubes de cenizas de un volcán islandés en erupción podrí­an perturbar gravemente la llegada por ví­a aérea de las delegaciones extranjeras.

En efecto, el espacio aéreo polaco seguí­a cerrado hasta nueva orden, anunció el sábado la Agencia nacional de navegación aérea (PAZP), al igual que el de la mayorí­a de los paí­ses del norte de Europa.

Para la ceremonia de este sábado, un amplio perí­metro del centro de Varsovia habí­a sido cerrado al tráfico.

Desde horas tempranas de la mañana, afluyeron habitantes de toda Polonia, muchos de ellos vestidos de negro, y algunos con trajes regionales o de la nobleza del siglo XVII.

Jan Szylborski, acompañado por su esposa Wieslawa, habí­a salido a las siete de la mañana de Ostrow Mazowiecka, en el este del paí­s.

«Debemos estar aquí­ en este momento dramático. Demostramos qué valores son importantes para nosotros, valores cristianos y patrióticos», afirmó. El hijo de la pareja tuvo que esperar 16 horas para expresar su homenaje a los Kaczynski, cuyos féretros están expuestos desde el martes en el Palacio presidencial. «Estaba orgulloso de estar ahí­», dijo su padre.

A las 17H30 (15H30 GMT), los féretros del presidente y de su esposa serán transferidos a la catedral de San Juan, donde se celebrará una ceremonia religiosa.

Los cuerpos serán luego llevados a Cracovia, en el sur del paí­s, para los funerales previstos este domingo. La antigua capital de Polonia se preparaba a albergar hasta a un millón de personas en las exequias de la pareja presidencial.

«Â¡Semejantes cosas no ocurren jamás, son imposibles! Es la mayor tragedia en la historia de Polonia desde la Segunda Guerra mundial.»

Donald Tusk

Primer ministro polaco