Multan al obispo Williamson por negacionismo


Una mujer muestra el mensaje del obispo británico Richard Williamson. FOTO LA HORA: AFP OLIVER LANG

Un obispo católico integrista británico, Richard Williamson, fue condenado a una multa de 10.000 euros (13.500 dólares) en Alemania por negacionismo al cabo de un juicio que pesó en las relaciones entre Berlí­n y El Vaticano.


El tribunal de Ratisbona (sur de Alemania) condenó en ausencia al obispo de 70 años por incitación al odio racial, a raí­z de declaraciones difundidas por una televisión sueca en enero de 2009.

El prelado sostuvo en esa entrevista realizada en Ratisbona y difundida por la televisión sueca el 21 de enero de 2009, que «de 200.000 a 300.000 judí­os murieron en los campos de concentración pero ni uno en las cámaras de gas», negando la matanza de seis millones de judí­os por la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

Al recibir la denuncia, el tribunal de Ratisbona propuso a Williamson aceptar un procedimiento judicial simplificado y cerrar el caso mediante el pago de una multa de 12.000 euros, a lo cual el obispo se negó por discrepar con el tipo de acusación argumentando que sus declaraciones estaban destinadas al público en Suecia únicamente.

Las declaraciones de Williamson generaron conmoción en todo el mundo, sobre todo por haberse divulgado poco antes de que el papa Benedicto XVI, de nacionalidad alemana, levantara la excomunión de cuatro obispos de la tradicionalista Fraternidad San Pí­o X, entre ellos la del acusado.

Asimismo, esas declaraciones lo obligaron en febrero de 2009 a irse de Argentina, donde residí­a desde 2003 -el obispo reside actualmente en Londres- y causaron fricciones entre Alemania y el Vaticano.

La canciller alemana Angela Merkel se habí­a indignado y pidió públicamente al Papa que condenara al obispo.

Benedicto XVI habí­a expresado su «plena e indiscutible solidaridad» con los judí­os y habí­a condenado el negacionismo de la matanza perpetrada por los nazis, sin poner en duda sin embargo la reintegración del obispo integrista.

El Vaticano pidió luego a Williamson que «tome sin equí­voco y públicamente sus distancias» con esas declaraciones.

La jueza Karim Frahm estimó que el prelado británico era culpable porque se habí­a expresado en territorio alemán, y que «podí­a dar por descontado que sus declaraciones producirí­an escándalo» y que serí­an reproducidas ampliamente por la prensa.

El abogado del obispo, Matthias Lossmann, explicó que su cliente no fue autorizado por su comunidad religiosa a acudir al tribunal para explicarse. Convino que las declaraciones del prelado eran «inadmisibles».

Pero argumentó no obstante que el obispo no podí­a ser considerado responsable del hecho de que sus declaraciones, hechas a un canal sueco, hayan sido diseminadas en Alemania.

«Teniendo en cuenta las circunstancias, si no hubiese estado convencido de que la entrevista serí­a difundida únicamente por la televisión sueca, jamás habrí­a aceptado su difusión», afirmó Williamson citado por su abogado ante el tribunal.