Irán ensambla centrifugadoras de uranio


Visita. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad (C) en la planta de enriquecimiento de uranio en la región de Natanz.

Irán está fabricando las primeras de las 3.000 centrifugadoras que quiere instalar en un sitio subterráneo para enriquecer uranio a pesar del cuestionamiento de la ONU a su programa nuclear, dijeron fuentes diplomáticas en Viena.


Irán está fabricando las primeras de las 3.000 centrifugadoras que quiere instalar en un sitio subterráneo para enriquecer uranio a pesar del cuestionamiento de la ONU a su programa nuclear, dijeron fuentes diplomáticas en Viena.

Según las fuentes, consultadas anoche, Irán también restringió el trabajo de los inspectores de la Agencia Internacional de Energí­a Atómica (AIEA), una información que fue desmentida por el gobierno de Mahmud Ahmadinejad.

Pero todaví­a no se ha instalado una serie o cascada completa de centrifugadoras, la unidad básica para empezar el enriquecimiento en Natanz (centro), explicaron los diplomáticos, que pidieron anonimato.

«La construcción ha empezado (en la planta subterránea de Natanz), pero todaví­a no se han montado las cascadas», dijo uno de ellos.

Otro diplomático indicó que la instalación de las centrifugadoras empezó la semana pasada.

Irán utiliza cascadas de 164 centrifugadoras cada una. Dos de ellas ya funcionan con fines de investigación en Natanz, en una planta piloto situada en superficie. Esta fábrica sólo puede producir pequeñas cantidades de uranio enriquecido.

Por el contrario, la instalación subterránea, protegida como un búnker contra eventuales bombardeos aéreos, podrí­a producir, cuando funcione a plena capacidad, a nivel «industrial», bastante uranio altamente enriquecido en un año para fabricar una bomba atómica, declararon expertos.

Las centrifugadoras producen uranio enriquecido, que puede servir de combustible para los reactores nucleares civiles, pero también ser utilizado para fines militares y fabricar bombas atómicas.

Este inicio del ensamblaje en el emplazamiento subterráneo de Natanz marca un paso más en la crisis entre Irán y los paí­ses occidentales, que sospechan que Teherán quiere desarrollar armas atómicas.

El Consejo de Seguridad de la ONU le impuso en diciembre sanciones para que detenga las actividades de enriquecimiento de uranio.

De acuerdo con la resolución del Consejo de Seguridad del 23 de diciembre, el director de la Agencia Internacional de Energí­a Atómica (AIEA), Mohammed ElBaradei, debe presentar un informe el próximo 21 de febrero, y constatar ahí­ que los iraní­es han hecho caso omiso de las exigencias de la ONU.

La agencia nuclear iraní­ negó recientemente que su paí­s hubiera empezado a instalar 3.000 centrifugadoras para enriquecer uranio, poco después de que el presidente de una comisión parlamentaria dijera que sí­ habí­a empezado.

Diplomáticos indicaron también a la AFP en Viena que Irán impide que los inspectores de la AIEA instalen cámaras de vigilancia en la parte subterránea de Natanz, lo cual fue desmentido el viernes por el gobierno iraní­.

«Los iraní­es sólo están dispuestos actualmente a aceptar la instalación de cámaras en el exterior de las salas donde se encuentran las cascadas, lo que no permite a la AIEA vigilar el conjunto del proceso de enriquecimiento de uranio», declaró un diplomático que requirió anonimato.

«No hay ninguna restricción y sigue el trabajo de los inspectores de la agencia conforme al Tratado de no proliferación», declaró a la AFP en Teherán un alto funcionario iraní­ que pidió el anonimato.

«En el marco de los compromisos de Irán con la AIEA, no hay y no habrá ninguna restricción para el acceso de los inspectores», añadió.

La vigilancia de dichas instalaciones mediante cámaras e inspecciones está contemplada en los acuerdos previstos en el Tratado de No Proliferación (TNP), suscrito por Irán.