Al parecer, la información sobre el mal estado del Lago de Atitlán fue «exagerada»; autoridades que velan por el bienestar del lago así­ lo declaran.

«El lago realmente no estaba como se decí­a en los medios de comunicación, eso de que estaba en coma o que estaba muerto no fue así­», fueron las declaraciones de Marvin Romero, subdirector de la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca del Lago de Atitlán y su entorno, (Amsclae).

Romero asegura que el fenómeno ocurrido en dicho afluente fue alarmante y que llamó la atención de todos para entender que hay que cuidar el lago, «pero el lago en sus caracterí­sticas quí­micas y fí­sicas no cambió tanto como se decí­a».

A decir del subdirector de Amsclae, esto puede comprobarse con una visita al lugar, «si usted lo viene a ver ahora, puedo decirle que es un lago sano si se le hacen los exámenes quí­micos y fí­sicos», dice.

Además, se informó que desde diciembre pasado el lago «cambió totalmente», pues ahora posee las caracterí­sticas fí­sicas de transparencia y sin mal olor, «regresó a ser el Atitlán que se conocí­a anteriormente», anunció el experto.

Ayuda continúa

Mientras se mejora totalmente la salud del lago de Atitlán, se continúa con los procedimientos e instalación de nuevos equipos, por ello, ayer fue instalado un oxigenador cuya función es limpiar el agua por medio de hélices que remueven el lí­quido desde el fondo, «esto permite oxigenar y contribuye a la disminución de la cianobacteria pues no permite que ésta se desarrolle», explica Romero.

En el transcurso de tres semanas serán instalados otros tres aparatos que se ubicarán en puntos estratégicos a definir mediante el análisis de las caracterí­sticas del lago en diferentes zonas y según condiciones técnicas como profundidad.

El área que cubre cada uno de estos aparatos no es muy grande, por lo que es necesario ampliar el número de oxigenadores, a decir del subdirector de Amsclae la efectividad de éstos es para mezclar sobre 300 metros.

«Si es un lago que está en riesgo y que hay que cuidarlo y protegerlo, pero no llegó al extremo que se dijo, creo que se exageró un poco», finalizó Romero.