El chileno Fernando González arrolló hoy al alemán Tommy Haas con un tenis sin fisuras para garantizar un lugar en la final del torneo Abierto de Australia, donde se enfrentará al suizo Roger Federer, número uno del mundo.
González, 10º preclasificado, mantuvo su impresionante nivel de las rondas anteriores para borrar de la cancha a Haas con 6-1, 6-3, 6-1 en apenas una hora y media de juego, en un desempeño de recordó la aplastante victoria de Federer sobre el estadounidense Andy Roddick en la otra semifinal.
Antes de despachar a Haas con su notable demostración, González ya había eliminado al ídolo australiano Lleyton Hewitt, el creciente estadounidense James Blake y al número 2 del mundo, el español Rafael Nadal.
«Este viernes ha sido realmente un excelente día. En mis últimos cuatro partidos he estado jugando un gran tenis, lo estoy disfrutando enormemente y estoy actuando en todos los rincones de la cancha. Además, siempre he estado calmo en los momentos importantes», dijo el chileno luego de su victoria.
En todo el partido, González apenas cometió tres errores no forzados, contra 21 del alemán Haas.
«Eso no es gran cosa para mí, porque he estado jugando durante años ganando partidos con 42 errores no forzados y tres golpes decisivos, de forma que ahora estoy tratando de construir los puntos», acotó.
«Hubo un momento en que comencé a ganar partidos sin jugar tan bien y eso me dio mucha confianza. Pero en los últimos seis meses recorrí un largo camino. Antes to tenía miedo que dejar que los partidos se extiendan mucho. Ahora puedo jugar el tiempo que sea necesario y mantenerme calmo», indicó.
En la cancha, el chileno utilizó su enorme servicio y su tremendo golpe de revés para atormentar a Haas. «Mi golpe de ’drive’ también está mejor. Ahora puedo jugar cinco sets si quiero, y me siento verdaderamente feliz con eso», comentó.
Con relación al partido del domingo contra Federer, un tenista que ha demostrado una supremacía casi total en el circuito en las últimas temporadas, González dejó claro que mantiene la autoconfianza.
«Roger es el número uno del mundo, con mucha ventaja. Pero el domingo tendremos que jugar solamente un partido, queda apenas un partido en este torneo. He perdido varias veces ante él, pero yo ahora estoy jugando mucho mejor que la última que lo enfrenté», dijo.
En nueve partidos entre ambos, Federer cosechó nueve victorias.
Este viernes, González se convirtió apenas en el tercer tenista sudamericano a clasificar a la final en Australia en la era de los torneos Abiertos (desde 1969), después que lo consiguieran el argentino Guillermo Vilas en 1977 y 1979, y el también chileno Marcelo Ríos en 1998.
En cambio, fue una nueva decepción para Haas, de 28 años, quien buscaba un lugar en la final del torneo australiano después de caer dos veces en semifinales: ante Yevgeny Kaflenikov en 1999 y Marat Safin en 2002.
Haas no consiguió siquiera alcanzar un punto de quiebra de servicio ante González en los tres sets que jugaron.
Como ya lo había hecho ante Hewitt en la tercera ronda, el chileno jugó un tenis sin puntos frágiles, al punto que su primer error no forzado llegó apenas en el primer punto del segundo set.
El chileno, que está jugando en el mejor nivel de su carrera bajo la conducción del estadounidense Larry Stefanki, quebró el servicio del alemán tres veces y liquidó el primer set en apenas 28 minutos.
Quebró el servicio de Haas nuevamente en el segundo punto del segundo set y en dos oportunidades en la última manga. Además, redondeó su producción con nueve ’aces’.
Haas reconoció que nada pudo hacer ante el chileno este viernes, a pesar de las alternativas que intentó.
«Realmente, casi todos sus golpes encontraron su camino. Siento que incluso no jugué mal. Creo que hasta jugué un tenis bastante bueno. Pero cada vez que intentaba algo diferente, él rápidamente me sorprendía con la respuesta», señaló el alemán.
La de este viernes fue la segunda victoria de González sobre Haas en dos partidos ente ambos.