¿Incluye la reforma policial, Escuela para Oficiales de Policí­a? I de II


El tema de la seguridad ciudadana, de la seguridad nacional, de la seguridad del Estado es un tema que está entre los puntos más importantes del quehacer gubernamental; prueba de ello es el nuevo impulso que se inicia con la integración de una comisión o grupo que tiene por misión establecer las bases la dicha reforma.

Fernando Mollinedo
fermo@intelnet.net.gt

En mi artí­culo anterior, expresé mi opinión respecto que la reforma policial debe considerar los aspectos técnicos y pedagógicos para los futuros alumnos que pasen a integrar las filas de aspirantes a Policí­a Nacional Civil.

Pero… también es necesario establecer las condiciones infraestructura, planificación, presupuesto, personal docente y otros aspectos esencialí­simos para la creación de la Escuela para Oficiales de la Policí­a Nacional Civil; es decir, con niveles técnicos y pedagógicos mucho más formales y con especialización determinada.

La Comisión de Reforma Policial tendrá un trabajo de muchí­sima responsabilidad social; porque deberá considerar aspectos de formación policial para agentes: formación de Oficiales de Policí­a con nivel universitario; estructuración de pensa de estudios; instalaciones adecuadas para la formación policial; selección de cuerpo técnico y docente por oposición, es decir, que no se admitan «recomendaciones»; eso en el aspecto de la formación como proceso de conocimiento.

Aparte, habrá otras consideraciones de tipo institucional administrativo; asuntos presupuestarios asignados por el Ministerio de Gobernación y/o Dirección Técnica del Presupuesto; también el aporte de paí­ses amigos que enviarán representantes/consultores para aportar ideas y que la reforma responda a las necesidades e idiosincrasia de los guatemaltecos.

La revisión obligada de la Ley de la Policí­a Nacional Civil; su régimen interior; su estructura administrativa; la carrera policial; la instauración del escalafón policial; el estudio de aumento de sueldos, la conservación y buen uso del parque vehicular; la oportunidad de especializaciones para investigación; la recuperación del respeto ciudadano, en fin… son muchos los temas a tratar por esta Comisión de Reforma Policial.

Si el Estado de Guatemala invierte en este rubro, es seguro que dentro de unos pocos años se principiarán a cosechar buenos resultados, la ciudadaní­a responderá con cooperación y estará anuente a la implementación de planes y programas para la prevención del delito en sus comunidades.

Es necesario e imprescindible un cambio, aparte de lo técnico, legal, administrativo y pedagógico; también es necesario revalorizar a los integrantes de la institución; para ello será necesario el decidido concurso de las actuales autoridades para dejar sentadas las bases sólidas de un cambio social para la seguridad de los guatemaltecos.