El Airbus militar pende de un hilo


El Airbus militar realizó su primer vuelo de prueba en diciembre pasado, aterrizando en el aeropuerto de Sevilla, España. FOTO LA HORA: AFP BERTRAND GUAY

El futuro del avión militar A400M del constructor aeronáutico europeo Airbus es más que incierto a raí­z de las dificultades que enfrenta el programa, a pesar de un primer vuelo exitoso y la voluntad de Francia de seguir adelante con el proyecto.


Airbus y su casa matriz EADS negocian desde hace varios meses con los siete paí­ses (Alemania, Francia, Reino Unido, España, Bélgica, Turquí­a y Luxemburgo), que encargaron 180 aeronaves por 20.000 millones de euros (unos 29.000 millones de dólares).

Ante los gastos adicionales que ha acarreado el desarrollo del programa, el presidente de Airbus, el alemán Thomas Enders, pide a sus clientes aumentar sus contribuciones.

Más aún, según la prensa alemana, Enders declaró en una reunión de la dirección del grupo que «ya no creí­a en la continuidad del programa».

Incluso ya existirí­an listas de ingenieros que serí­an reafectados del programa A400M a otros en desarrollo en Airbus, como el A380 y el A350, agrega la prensa alemana.

El presidente de Airbus «no está en condiciones de poner en peligro el segmento de aviación civil, que funciona bien, a raí­z del A400M», según una fuente del grupo aeronáutica no identificada citada por un diario alemán.

El proyecto del A400M, que aspira a ser el futuro avión de transporte de los ejércitos europeos, habí­a sido lanzado en 2003 por los siete paí­ses que ya encargaron aeronaves.

Con casi un año y medio de retraso respecto al plan inicial por dificultades en su desarrollo y construcción, el A400M efectuó con éxito su primer vuelo de prueba el 11 de diciembre pasado desde el aeropuerto de Sevilla (Andalucí­a, sur de España).

El miércoles, el ministro francés de Defensa, Hervé Morin, reafirmó que su paí­s quiere que el programa de construcción del avión del transporte militar «llegue a término».

«Queremos que este programa llegue a su término», declaró Morin a la prensa francesa.

«Es un avión en el que hemos puesto todos las innovaciones tecnológicas posibles», subrayó el ministro.

«Airbus en 2001, de manera muy imprudente a mi entender, decidió firmar una contrato civil y no un contrato militar» con los paí­ses involucrados en el proyecto, indicó.

Según Morin, en un contrato militar «siempre hay cláusulas que permiten la revaluación del precio porque se sabe que todos los programas militares tienen costos mayores de lo previsto».

De acuerdo con la prensa alemana, EADS pedirí­a a los clientes del A400M 5.000 millones de euros más.

Pero Alemania, que con 60 aparatos pedidos encabeza la lista, solo estarí­a dispuesta a pagar 650 millones de euros adicionales

«Está fuera de cuestión que paguemos más que el adicional de 650 millones de euros previstos en el contrato», dijo una fuente cercana al ministerio alemán de Defensa, citado por el periódico Handelsblatt.

«No veo ningún margen de maniobra para responder a los pedidos en miles de millones de euros de Airbus. El contribuyente no va a pagar por errores empresariales», declaró de su lado Elke Hoff, experto en cuestiones de defensa del partido liberal FDP, que integra el actual gobierno de la canciller Angela Merkel.