Alcalde «calcetí­n»


«…O sea, es una muestra pues, que la prensa tiene ese vaivén. Hacia donde ha ido es a donde quiera llevar al paí­s. Es por eso que cuando hablamos de la seguridad, yo creo que hay que controlar a la prensa. Esto quizá suena horrible ante los medios de información. Ahorita va a provocar algunos desmayos pero, yo creo que la gente me conoce y no tengo por qué estar ocultando ni haciendo ningún tipo de simbologí­as (sic). A la prensa hay que controlarla como se controla en todas partes del mundo?» Palabras textuales de í. A. pronunciadas el miércoles 16 de diciembre pasado, en el Programa Radiofónico Despacho Presidencial, en el que conversó con el presidente ílvaro Colom. Edición del diario elPeriódico, un dí­a después.

Ramiro Mac Donald
http://ramiromacdonald.blogspot.es/

Antes que todo: a la prensa de sustentación capitalista nadie la controla, salvo que sea en un régimen sin democracia, como en el que le gustarí­a vivir a este personaje tan nefasto para el paí­s, que no ha hecho nada para cambiar las desafortunadas estructuras de una ciudad caotizada y que ha, prácticamente, dirigido, a su conveniencia, durante las últimas dos décadas.

¿¡Pero… qué podemos esperar de este comediante de la polí­tica, si fue declarado Enemigo Número 1 de la Prensa cuando era mandatario y condenado, dos veces, por el valiente Procurador de los Derechos Humanos por violar el derecho a la libertad de expresión de los guatemaltecos!?

Además, es un asesino de medios de comunicación. Los ejemplos más claros son: la prestigiosa Revista Crónica y el Radio Diario Guatemala Flash. Y no pudo con Prensa Libre porque era y sigue siendo el medio más poderoso de los impresos en el paí­s? y hasta lo intentó contra el valeroso Diario La Hora, y afortunadamente tampoco lo logró.

Eso se llama actuar con soberbia. «O sea: intentos de controlar a los medios», pues afortunadamente, ya los guatemaltecos se dieron cuenta de quién es este señor, que sólo abre la boca para meter la pata. El es el alcalde-calcetí­n, que maneja una imagen internacional de extraordinario funcionario público, cuando en Guatemala todo mundo sabe los malos manejos de los fondos de la municipalidad, con la complicidad de algunos bancos nacionales. Pero algún dí­a saldrán a la luz? algún dí­a.

Sin embargo, cabe señalar, curiosamente, la aceptación popular que posee este tipo de personalidades prepotentes y que las ciencias sociológicas explican, como una delegación de poder de parte de los dominados en beneficio de los dominantes, pese a no estar dotado de las cualidades particulares que se le atribuyen? pero hay que añadir que se rodea de celosos auxiliares, en muchos casos eficientes. Sin embargo, el poder que posee en la actualidad, no está en relación a las auténticas y verdaderas competencias, que se le atribuyen.

El solo hecho que se aventure inexplicablemente a emitir una declaración como la que inicia esta columna, permite aquilatar su total desconocimiento de la realidad polí­tica mundial, y aunque haya sido electo presidente, en mala hora, y dos veces alcalde, sólo nos viene a demostrar la terrible mediocridad de nuestros polí­ticos.

Por eso? yo lo bautizo generosamente como «alcalde calcetí­n». Y si usted quiere reí­rse un poco, accese a sus interesantes declaraciones: http://elperiodico.com.gt/es/20091216/pais/129188 Son históricas? habrí­a que ponerlas en un marco de oro, pues lo retratan de cuerpo «enterito».