Los turistas que ingresen al país en un crucero y se hospeden menos de 72 horas quedarán exentos del impuesto por permanencia que anteriormente se cobraba, que era de 10 dólares, de este modo esperan captar un 30% más de turistas para mejorar los ingresos en otros sectores de la población.
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Aunque el Estado dejará de percibir los ingresos que provengan de los impuestos a los cruceros, se podrá beneficiar en otras áreas como en los ingresos en los hoteles, los taxistas y los vendedores que llegarán alrededor de 160 millones de quetzales percibidos que tendrán que pagar el Impuesto al Valor Agregado (IVA), señalaron los directivos del Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat).
El Inguat dio a conocer la aprobación del Decreto Legislativo 38-2009 por el Congreso de la República en el que los turistas de cruceros quedan exonerados del pago de impuestos marítimos si permanecen en el país menos de 72 horas, se espera que entre en vigor la próxima semana, después de ser publicado en el diario oficial.
Roberto Robles, director del Inguat, señaló que la industria de cruceros es una industria creciente que deja beneficios económicos al país a corto, mediano y largo plazo, genera empleos y promueve el turismo interno en pocas horas.
La modificación a la ley apoyada por las bancadas políticas se convierte en un nuevo incentivo a las empresas de cruceros que consideran a Guatemala como un destino importante en sus itinerarios de viaje.
Ahora se ofrece un doble atractivo para los cruceros: un destino turístico multicultural y mejores incentivos económicos para el turista ocasional, lo que contribuye a que este segmento turístico específicamente, vuelva al país por una estadía más larga.
Según estudios de la Florida Caribbean Cruise Association -FCCA-, el 50% de los cruceristas visitan nuevamente el destino que conocieron por unas horas durante sus vacaciones en el crucero. En el caso de Guatemala, el tiempo de permanencia que tienen en el país es un promedio de 12 horas.
La modificación de ley aprobada por el Congreso de la República permitirá al país un mayor ingreso de cruceros y la generación múltiple de empleos, especialmente en los departamentos cercanos a las terminales de cruceros en el Pacífico y Atlántico; a los micros y pequeños empresarios ubicados en Escuintla e Izabal particularmente.
Los ingresos al país por las visitas de cruceros durante el 2008 fueron de Q100 millones, en dicha temporada se generó un aproximado de diez mil empleos, entre directos e indirectos, arribaron en total 105 cruceros que atracaron en las terminales de Puerto Quetzal y Santo Tomás de Castilla en el Pacífico y Atlántico respectivamente.
La industria en sí permitió un acelerado movimiento en la prestación de servicios de atención por parte de lancheros, taxistas, artesanos, artistas locales y restaurantes a los 115 cruceros de la temporada, lo que apunta a prever que con esta modificación de ley que aprueba la exoneración del número de cruceros incremente e incentive al turismo de cruceros en el país.