RECORDANDO AL LIC. CLEMENTE MARROQUíN ROJAS


Paladí­n del periodismo nacional

Quien pudiera ser como el Lic. Clemente Marroquí­n Rojas que tuvo sabidurí­a en el pensamiento y amor por su paí­s en el corazón, porque para ser sabio visionario como él hay que tener el corazón de un gladiador lleno de amor, de ese amor como el que entregó nuestro Señor Jesucristo a la humanidad.

Jesús Alvizures, A-1 606839

El Roble del Jumay, fue un hombre fuerte que nunca se doblegó ni se plegó a bailar el son de los mafiosos, de los manipuladores, quienes terminaron admirando su valentí­a y aplomo en la honorabilidad, del hombre que sabe lo que hace y por qué lo hace. Sin recurrir a ambages, habló conciso y directo.

Esta es parte de la historia del paladí­n de la prensa guatemalteca, quien dijo DIARIO LA HORA ES TRIBUNA, NO MOSTRADOR, elocuencia y excelencia periodí­stica; diario La HORA se ha mantenido a la vanguardia de la tecnologí­a que no ha logrado orillarle al fracaso, porque es un diario de grandes dimensiones en credibilidad y cada dí­a escala un peldaño hacia la cumbre de la información veraz, legado de don Clemente llamado también el Tigre del Jumay, quien demostró su entereza en todos los aspectos de su vida.

Clemente Marroquí­n Rojas, bien llamado en su obituario UN HOMBRE DE AMí‰RICA, donde se recoge el sentir de un pueblo dolido por su partida.

Nuestro personaje, se dice que jamás se quitó el sombrero ante nadie con poder, pero se quitó el botón de Vicepresidente de la República para devolverlo al CONGRESO LEGISLATIVO en un sobre.

Porque según se sabe no comulgaba con la polí­tica que el gobierno del cual él formaba parte estaba implantando ya en el poder, injerencia de las fuerzas oscurantistas de operación al pueblo, al que lo amó entrañablemente y como dijera el eslogan del mismo gobierno LA PATRIA ES ARA NO PEDESTAL, si eso se cumpliera no hubiera tanta corrupción, libertinaje de la impunidad, serí­amos grades con acceso a todas las riquezas naturales del paí­s y no habrí­a hambre ni corredores secos, habrí­a pan y crecimiento en la economí­a nacional.

Los pobres no estarí­amos tan pobres, recibiendo algunos las prendas de la polí­tica que siempre mira hacia el futuro halando agua para su molino, no quieren soltar la gallina de los huevos de oro.-Que DIOS nos libre de la ambición que carcome el corazón del hombre.

Descanse en paz el patriarca de las letras guatemaltecas, defensor de los derechos del pueblo.