La organización islamista al-Qaeda pasa por una de sus peores crisis financieras, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
En lo que va de año, este grupo ya ha hecho varios llamamientos a sus seguidores para que les donen fondos, explicó David Cohen, secretario asistente del Departamento del Tesoro para temas relativos a la financiación de terroristas.
Por eso «la influencia de Al-Qaeda está cayendo», dijo Cohen, quien atribuyó parte de este declive a los esfuerzos de EE.UU. por asfixiar económicamente a esta red.
«Está en su peor situación económica en muchos años», añadió.