Casi dos años después de haber sido víctima de un sexoservidor que lo golpeó brutalmente en un hotel de la capital mexicana, Fabián Lavalle, «Fabiruchis», nuevamente se encuentra en el ojo del huracán. Y es que mientras unos medios aseguran que otra vez fue blanco de una golpiza, la versión de su oficina de prensa es totalmente distinta.
En la mañana del miércoles, el periodista Gustavo Adolfo Infante aseguró en el programa radial mexicano Reporte 98.5 FM: «El estado en el que se encontraba Fabiruchis luego de la nueva golpiza es delicado».
Según éste, Fabiruchis, de 58 años, fue encontrado por la policía tirado en una calle de la capital mexicana y, debido a los golpes que recibió fue trasladado de urgencias a un hospital de esa ciudad, donde está siendo evaluado por los doctores.
Pero la oficina de prensa de Lavalle asegura que «el conductor fue operado de emergencia de la cadera a raíz de varios dolores que sufrió la noche de este martes y que se incorporará a sus actividades el próximo lunes», negando rotundamente la presunta paliza.
La controversia va más allá. El programa Escándalo TV (Telefutura) aseguró que, una vez que Lavalle habría sido recogido por la ambulancia número 30 de la Cruz Roja Mexicana, Fabiruchis habría advertido a los paramédicos de no divulgar la supuesta golpiza o de lo contrario, los demandaría.
El 31 de octubre del 2007, Lavalle estuvo envuelto en un escándalo luego de haber sido golpeado por Alfredo Cervantes Landa en un hotel del Distrito Federal, según éste tras una pelea porque el conductor no quería pagarle por sus servicios.