Un retrovirus podría ser la causa del síndrome de fatiga crónica, según un estudio de un grupo de investigadores estadounidenses publicado el jueves y que potencialmente abre la vía a tratamientos para esta misteriosa enfermedad que golpea a millones de personas a menudo jóvenes.
«Tenemos ahora una prueba de que un retrovirus denominado XMRV está frecuentemente presente en la sangre de pacientes que sufren este síndrome», explicó la doctora Judy Mikovits, directora de investigación en el Whittemore Peterson Institute (Nevada, oeste), principal autora de este estudio.
«El hallazgo podría ser un avance importante en el desarrollo de tratamientos para millones de enfermos», añadió.
Pero los investigadores advierten que el descubrimiento de esta relación entre este retrovirus y el síndrome de fatiga crónica no prueba que este patógeno sea la causa de la enfermedad.
En el estudio, el retrovirus XMRV fue detectado en la sangre de 68 pacientes de 101, lo que equivale al 67%, mientras que sólo estaba presente en ocho personas de buena salud de 218 analizadas (3,7%), precisaron los autores.
El retrovirus XMRV fue inicialmente descubierto por el doctor Robert Silverman, profesor del servicio de biología del cáncer en el instituto de investigación Lerner de la Clínica Cleveland (Ohio, norte), en la sangre de hombres con un defecto específico de su sistema inmunitario que los volvía incapaces de combatir infecciones virales.
El mismo retrovirus fue luego encontrado en hombres con cáncer de próstata.
«El descubrimiento de que el XMRV puede estar asociado a dos enfermedades importantes, el cáncer de próstata y ahora el síndrome de fatiga crónica, es muy interesante porque si logramos establecer la relación de causa-efecto dispondremos de nuevas posibilidades de prevención y de tratamiento de estas patologías», indicó Silverman, uno de los autores de la investigación publicada en la revista estadounidense Science del 9 de octubre.
Otros estudios realizados con otros retrovirus similares al XMRV mostraron que estos patógenos pueden activar muchos otros virus en estado latente.
Eso podría explicar por qué una cantidad tan grande de tipos de virus diferentes, como el de Epstein-Barr responsable del linfoma de Burkitt o de la mononucleosis infecciosa (MNI) fueron asociados en los años 70 al síndrome de fatiga crónica, indicaron los médicos, precisando que el retrovirus XMRV no se transmite por vía aérea.