La 34ª entrega del Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) que comienza el jueves próximo será más austera que las precedentes y cuenta con un programa fuertemente marcado por la crisis.
«La crisis económica que comenzó hace más o menos un año ha repercutido sobre el festival este año», constató uno de los directores del evento, Cameron Bailey en una entrevista.
Los centenares de recepciones y otras galas que acompañan al mayor festival de cine de América del Norte serán menos espectaculares este año.
El festival se vio enfrentado a una «disminución de las contribuciones de los patrocinadores», comentó Bailey. «Como casi todas las organizaciones artísticas, fuimos afectados por la recesión».
Esto se vio reflejado también en la pantalla donde abundan las «visiones apocalípticas», agregó.
Esto se encuentra por ejemplo en el filme «La route», adaptación del libro del autor ganador del Pulitzer Cormac McCarthy, donde Viggo Mortensen y Charlize Theron descubren un mundo de posguerra nuclear.
También es notable este pesimismo en el film «Les Derniers Jours du Monde» de los hermanos franceses Arnaud y Jean-Marie Larrieu, así como en el documental «Collapse» con el periodista Michael Ruppert quien predijo la crisis con su carta electrónica «From the Wilderness».
En 2008, el fin de la presidencia de Bush había iluminado el festival con varias comedias marcando así un quiebre con la filmografía de años anteriores que tocaba temas como la guerra de Irak. Pero las risas se callaron pronto con el estallido de la crisis inmobiliaria estadounidense y sus consecuencias a nivel mundial.
«No solamente perdimos dinero sino que también perdimos la fe en el mercado, y muchos empresarios exitosos fueron presos», subraya Bailey.
La selección de 2009 cuenta con varias películas inspiradas directamente por la crisis, como «Up in the Air» de Jason Reitman, con George Clooney en el papel de un especialista en despidos. Otro caso es el «The Joneses» de Derrick Borte y «The Informant» de Steven Soderbergh.
Estas películas «arrojan una mirada sobre la empresa Estados Unidos» y «juzgan vigorosa y profundamente los valores del mercado y la manera en que este último puede infectar las relaciones humanas», continúa el organizador del TIFF.
En esta misma línea se encuentra el documental que presentará Michael Moore «Capitalism: A Love Story».
A diferencia de los festivales europeos, el de Toronto no ofrece premios de un jurado.
El jueves próximo el festival abrirá con el filme británico «Creation», de Jon Amiel, una biografía crítica del padre de la teoría de la evolución, Charles Darwin. Durante diez días se exhibirán otros 270 largometrajes de ficción y 64 cortometrajes.
Se espera que asistan más de 500 celebridades, entre ellas el rockero francés Johnny Hallyday y la actriz española Penélope Cruz así como los estadounidenses Matt Damon, Nicolas Cage, Natalie Portman y Michael Douglas.