Al menos diez comunidades chortíes de Jocotán y Camotán, de Chiquimula, manifestaron su preocupación ante la autorización que la Comisión Nacional de Energía Eléctrica (CNEE) hizo para que se construya la hidroeléctrica «El Orégano», en las riberas del río Grande o Jupilingo.
Ligia Flores
lflores@lahora.com.gt
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Denunciaron no haber sido consultadas para tal megaproyecto, que amenaza la integridad de unas 10 mil personas, y a sus cultivos de maíz, frijol y tule.
Ante tal situación, exigen «anular todo lo actuado» por la CNEE y a respetar la decisión del pueblo chortí.