La fiscalía afirma que «posiblemente» los responsables del crimen sean miembros de uno de estos grupos criminales.
«Está detenida una persona, a la que se está investigando para determinar si tiene alguna relación en el hecho», dijo a la prensa el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Carlos Ascencio.
Según el jefe policial, la persona arrestada fue detenida cerca de la zona donde el miércoles fue asesinado Poveda, pero no dio detalles sobre el hecho.
«Estamos en el proceso de investigación, no se pueden dar más detalles» sobre el arresto del sospechoso, señaló el director de la policía.
Poveda fue asesinado a balazos en una carretera ubicada entre las ciudades de Apopa y Tonacatepeque, a unos 15 km al noreste de San Salvador.
Por su lado, el fiscal general, Astor Escalante, dijo a la prensa que «no se puede descartar» que en el asesinato de Poveda estén involucrados miembros de pandillas.
«í‰l (Poveda) tenía contacto con pandilleros activos, altamente peligrosos», señaló Escalante, tras señalar que «no podemos descartar ninguna hipótesis, es posible que haya pandilleros involucrados» en el crimen.
El director del Instituto de Medicina Legal, Mario Hernández, dijo que la autopsia determinó que Poveda recibió cuatro impactos de bala en el rostro.
El presidente salvadoreño, Mauricio Funes, dijo este jueves que el homicidio «ha conmocionado» al país y que ordenó una profunda investigación, mientras la Embajada de Francia expresó que confiaba en que las autoridades salvadoreñas aclararán el crimen.
«El asesinato ocurrió bajo circunstancias muy extrañas, y le di instrucciones precisas al ministro (de Justicia y Seguridad, Manuel Melgar) y al director de la policía (Carlos Ascencio) para que investiguen este crimen», dijo Funes, quien es periodista de profesión.
«No dudo que la policía y que la fiscalía salvadoreñas pongan todos los medios para resolver este horrible asesinato, identifiquen los culpables, los capturen y los enjuicien», señaló la embajadora francesa, Blandine Kreiss, en un comunicado.
Se prevé que los restos de Poveda sean trasladados a Alicante, España, donde reside su familia, dijo la Embajada francesa.
Poveda, que nació en Argelia (cuando era parte del territorio de Francia) en una familia española, cubrió la guerra civil salvadoreña (1980-1992) para diferentes medios de Europa y Estados Unidos, y volvió y se instaló en El Salvador en 2003, donde tenía una pareja salvadoreña.
En los últimos años filmó el documental «La vida loca» (2008) sobre las pandillas salvadoreñas, con el cual participó en numerosos Festivales de Cine, entre ellos el de San Sebastián, en España.
Para realizar el documental, Poveda convivió durante año y medio con una pandilla, pero aparentemente su trabajo molestó a otros pandilleros, que lo amenazaron de muerte, según la prensa local.
El Salvador, al igual que otros países del norte de Centroamérica, tiene altas tasas de homicidios y las «maras» o pandillas están involucradas en todo tipo de delitos, desde extorsiones a comerciantes y transportistas, hasta asesinatos.
Colegas de Poveda dudan de que haya sido víctima de un vulgar intento de robo, puesto que los homicidas no se llevaron el vehículo ni sus cámaras y equipos de grabación.
«No fue un intento de robo. Sus cosas y su vehículo estaban ahí», dijo a la AFP un fotógrafo amigo de Poveda, quien pidió no ser identificado.
El Comité para la Protección de Periodistas, organización estadounidense independiente, reclamó este jueves que la investigación del crimen sea exhaustiva y permita castigar a sus autores, mientras que Reporteros Sin Fronteras pidió una cita a Funes debido a este homicidio.