El fuego azotaba el sur de California, atrapando al menos a cinco personas, y los bomberos advirtieron que el feroz incendio probablemente arda fuera de control durante dos semanas más.
«Este es un fuego furioso. Hasta que no cambien las condiciones climáticas no soy muy optimista», dijo Mike Dietrich, comandante del Servicio Forestal de Estados Unidos, al diario Los íngeles Times.
El incendio ya provocó la muerte de dos bomberos el domingo y los socorristas luchaban hoy por rescatar a cinco personas atrapadas por las llamas. Unas 10 mil personas han sido evacuadas de sus hogares.
El fuego ya destruyó 42.612 hectáreas de bosque seco en el norte de Los íngeles y seguía extendiéndose, indicaron las autoridades.
Más de 3.655 bomberos luchaban contra el incendio, que ya lleva casi una semana, en el bosque nacional de Los íngeles, que enviaba una espesa nube de humo hacia la ciudad y hacia Las Vegas, al este.
Las llamas amenazaban una antena de comunicaciones que pertenece a varias cadenas de televisión, radio, proveedores de teléfonos celulares y numerosas agencias de las autoridades estadounidenses en el Mount Wilson.
El valle de San Gabriel, al este de Los íngeles, experimentó un récord de calor y baja humedad, con temperaturas que rondaron los 40 grados Celsius, indicó el Servicio Nacional de Meteorología al agregar que la región continúa en alerta roja.
Uno de los factores claves en la expansión del fuego es que la mayoría de las zonas es riesgo está cubiertas por una vegetación que no ha vivido un siniestro similar desde hace 40 años, lo cual las convierte en más vulnerables a las llamas.