Nuestra Muni se ha olvidado de sus jubilados municipales


En todas partes del planeta tierra se está sufriendo el alto costo de la vida, pues ya es del conocimiento en general de toda la ciudadaní­a pobre y económicamente poderosa, de nuestro mundo.

Manuel A. Duarte E.

Pues los que tienen suficiente dinero, no sienten el sufrimiento del hambre como los pobres jubilados de pensiones raquí­ticamente bajas de los jubilados municipales. Pues a la vista está que nuestra moneda del quetzal no vale nada a la par del dólar americano y eso lo sabe mejor el señor alcalde municipal, ílvaro Arzú Irigoyen.

Cada dí­a sube el precio de la canasta básica familiar en todos los mercados a nivel nacional, no digamos las medicinas, pues muchos jubilados no los cubre el programa del I.V.S. de pensionados del Seguro Social. Nadie ignora la situación a nivel mundial. Todo está muy bien en las mejoras de la Ciudad de Guatemala, pero siempre acordarse de los pobres jubilados de nuestra Muni. Que también son de la familia municipal que dejaron muchos años de trabajo por el engrandecimiento de nuestra ciudad de Guatemala, por muy humildes que sean se merecen un aumento salarial, para mejorar su situación económica hogareña. El año pasado, 2008, el señor presidente de la República ingeniero ílvaro Colom Caballeros, les aumentó a sus trabajadores y jubilados del Estado, así­ también el Instituto de Seguridad Social aumentó a sus pensionados del I.V.S. la cantidad de 100 quetzales mensuales, no obstante, esa institución que la han castrado demasiado sus fondos los malos hijos guatemaltecos, pero los jubilados agradecen a esa institución los centavitos que llegan a sus bolsillos para solucionar sus problemas económicos; ojalá también la Muni, responda al clamor de la desesperación de las pensiones raquí­ticas de los jubilados que reciben de la Municipalidad desde hace años que no tienen un su reajuste a sus pensiones, ojalá que el señor Alcalde reconsidere a esos guatemaltecos jubilados para que sea mejorada sus pensiones para aliviar los momentos difí­ciles, los últimos dí­as de su existencia a cada uno de ellos, así­ responderá con justicia la Muni de la Ciudad de Guatemala.