Larrazábal conoció un estudio que le entregó el Consulado de Comercio, su título: Apuntamientos sobre la Agricultura y el Comercio del Reyno de Guatemala. Dice tal estudio que una de las causas del atraso era la existencia del latifundio. En 1810 ya se veían análisis de una reforma agraria.
Al retornar Fernando VII a España, en 1814, hubo un total absolutismo, al grado que Larrazábal permaneció preso durante tres años en Cádiz, de 1815 al 18. Soportó un confinamiento total. Pasó en la misma condición en el Convento de la Orden de Belén en la ciudad de La Habana, y luego en el convento de la misma orden en Guatemala en 1819. Al producirse el levantamiento de Rafael de Riego en 1820 Larrazábal salió de prisión.
No está por demás decir que las instrucciones en las que fue el principal redactor don José María Peinado, Regidor Perpetuo y Decano del Ayuntamiento habían sido declaradas sediciosas y mandadas a quemar en la Plaza Pública por orden del cruel Bustamante y Guerra.
Cuando el Ayuntamiento inició sus sesiones en el nuevo período absolutista en 1815, hubo quien solicitó retirar el retrato de Larrazábal, y que no asistiría a las sesiones en tanto dicho retrato estuviera en la sala y menos junto al retrato de Fernando VII.
La trayectoria de Larrazábal fue de muchos años haciendo el bien. Tomó parte en el Congreso de Panamá en 1826, convocado por Simón Bolívar en un intento por unir a los nuevos países. Ocupó cargos importantes dentro de la Iglesia. Los últimos años de su vida los pasó predicando en Catedral donde el pueblo se acostumbró a observarlo siempre en actitud de oración. Murió en 1853 a consecuencia de una complicación de catarro.
La Iglesia ha dado siempre mártires por las causas sociales. En este caso de nuestra Independencia el Padre Benito Soto decidió seguir la suerte de los granadinos quienes se rebelaron a principios de enero de 1812. Para reprimirlos fueron enviados batallones que salieron de Olancho, San Miguel y Cartago. El proceso en contra de aquellos próceres fue largo. Conducidos a pie desde Granada a las cárceles de Guatemala y encadenados. El padre Benito Soto murió mientras cumplía su prisión en ultramar.
En diciembre de 1811 hubo un levantamiento en León, Nicaragua, en donde quedó formada una Junta siendo su presidente el Obispo don Nicolás García Jerez, quien en apariencia permanecía con los próceres, pero cuando recibió órdenes de Bustamante y Guerra de iniciar el proceso en contra de los patriotas no los ayudó, a pesar de haberse dictado penas severas de muerte y prisiones perpetuas. Solamente la declaratoria de 15 de Septiembre de 1821 pudo salvar a algunos que quedaban prisioneros.
Quizá la biografía más completa sobre Larrazábal la escribió César Brañas en la Revista de la Usac en 1953.
Nuestra historia constitucional arranca de lo actuado en Cádiz. En los diarios de las sesiones se ve claramente la influencia de la Revolución Francesa y de los enciclopedistas. Las nuevas ideas de la ilustración encontraron resistencia en sectores conservadores.