Marsella rinde homenaje a Saint-Exupéry


Marsella, en el sur de Francia, rindió homenaje ayer al aviador y escritor Antoine de Saint-Exupéry con motivo del 65 aniversario de su desaparición frente a las costas de la ciudad.


Unas 400 personas, entre ellas el alcalde de Marsella, Jean-Claude Gaudin, y el secretario de Estado de Defensa y de Antiguos Combatientes, Hubert Falco, siguieron el homenaje desde tres barcos de la Marina francesa.

Varias coronas de flores en recuerdo del autor de «El Principito» fueron lanzadas al mar.

Un desfile de la patrulla aérea acrobática de Francia puso el broche final a la ceremonia.

Tres aviones Mirage 2000, un Noratlas, un avión de transporte del perí­odo que siguió inmediatamente a la Segunda Guerra Mundial, y un Lightning P-38, el avión de la última misión de Saint-Exupéry, surcaron el cielo marsellés.

«Este homenaje nos emociona profundamente», declaró Franí§ois d»Agay, de 84 años, sobrino del aviador.

«El es universal, no es sólo propiedad de su familia», subrayó su hermano Jean durante una ceremonia en la alcaldí­a marsellesa.

El avión del comandante Antoine de Saint-Exupéry despegó de la isla de Córcega (sur de Francia, en el Mediterráneo) y se hundió en el mar el 31 de julio de 1944, cuando efectuaba una misión de reconocimiento y observación fotográfica para preparar un desembarco aliado.

Marsella también inauguró el viernes una exposición gratuita que cuenta entre sus piezas con una pulsera que perteneció al escritor y que fue encontrada el 7 de septiembre de 1998 por un pescador de la localidad.