El Vaticano es un banco de secretos e historias, muchas de ellas terribles, lo que sirve de inspiración para escritores, aseguró el mexicano Pedro íngel Palou, que presentó en Lima su última obra «El dinero del diablo», una trama de intrigas en la época del Papa Pío XI.
«El Vaticano está lleno de secretos y de historias, algunas de ellas verdaderamente terribles, por lo que faltarían escritores para penetrar en ese mundo y seguir produciendo libros», dijo Palou.
Señaló que lo interesante es que «el Vaticano aún vive bajo la idea que este mundo no es transparente y por eso sigue ocultando secretos, creyendo que no se van a saber, cuando ahora tarde o temprano todo se sabe».
El escritor, de 43 años, que presentó «El dinero del diablo» en la XIV Feria Internacional del Libro, dijo que el Vaticano «ha estado ligado a intereses políticos, a los grandes momentos de la historia del mundo, muchos de ellos profundamente oscuros».
Palou ha sido funcionario público, profesor universitario, editor, investigador, promotor cultural, chef de cocina y árbitro de futbol, entre otros.
«El dinero del diablo», finalista del Premio Iberoamericano de Narrativa Planeta Casamerica-2009, es un relato que mezcla la época del Papa Pío XI con la actualidad.
Para captar la atención del lector, el escritor se vale de una serie de asesinatos, intrigas y «acuerdos oscuros» y asegura que en su obra hay «poco de ficción, mucho de historia y documentación».
La obra está basada en testimonios de «espías» que han trabajado en el entorno del Vaticano que le proporcionaron importante información, aunque ello le ha costado -según el autor- algunas amenazas.
Palou habla en su obra de una organización secreta al interior del Vaticano llamada Entidad. «No es producto de ficción, sino de la realidad extraída de los archivos del propio Vaticano», aseguró.
«A la Entidad perteneció Eugenio María Pacelli, quien tras la muerte del Papa Pío XI se convierte en Pío XII», precisó.
El escritor de «Malheridos» describe en la obra a Pío XI como «un hombre temerosísimo de lo que el llamaba el comunismo ateo, mientras su consejero Eugenio María Pacelli es hombre pragmático, a quien le importa sólo los fines y no los medios con tal lograr el objetivo».
Palou revela que su próximo trabajo será una novela histórica relacionada «al cristianismo primitivo».