El director de la policía colombiana, general Jorge Castro, ratificó hoy que fotografías aéreas de una zona ecuatoriana con cultivos de coca, son recientes y verdaderas, contrario a lo señalado por el canciller de Ecuador, Francisco Carrión, de que la información es incierta.
Castro, quien aclaró que no conoce si esos cultivos son de la guerrilla de la a guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), precisó que la zona cultivada de coca en Ecuador «sí existe».
«Yo estuve allá mirándolas personalmente. Eso es cierto, es una realidad. Nos reunimos con un coronel ecuatoriano en la frontera, y le dijimos: en tal parte hay un cultivo de coca, y le entregamos los mapas», agregó.
Según el oficial, «hoy estoy remitiéndole esas fotografías a mi amigo y homólogo, el general (José) Vinueza, director de la policía de Ecuador, para que ellos procedan a erradicar eso».
Castro dijo no entender la actitud del canciller Carrión, quien este martes señaló a radios colombianas que la denuncia es ’extraña’ y no es cierto que existan esos cultivos, de acuerdo con las informaciones que le han suministrado la policía y las Fuerzas Armadas de Ecuador.
«Lo voy a llamar (a Carrión) y si quiere con mucho gusto yo lo llevo hasta el lugar y le muestro para que no tenga mayores problemas en la localización», dijo el oficial colombiano, quien el lunes reveló la existencia de entre 10 y 15 hectáreas de cultivos de coca en un poblado ecuatoriano de la frontera.
«Las fotografías fueron tomadas el sábado cuando sobrevolábamos la zona fronteriza», señaló Castro, quien anotó que corresponde a las autoridades ecuatorianas investigar a quiénes pertenecen esos cultivos ilícitos.
El director de la policía colombiana dijo que la localización de esos cultivos y la denuncia respectiva se hizo porque el narcotráfico es un delito transnacional, y «debemos colaborarnos mutuamente».
Las relaciones entre Colombia y Ecuador se vieron afectadas en las últimas semanas por la decisión de Bogotá de reanudar las aspersiones aéreas de cultivos ilícitos en la frontera, que Quito rechaza.
Como resultado, el gobierno ecuatoriano llamó a consultas a su embajador en Bogotá, y el electo mandatario, Rafael Correa, suspendió una visita que tenía planeada para el pasado jueves a Colombia.