Ex guerrillero y ex presidente se perfilan para la presidencia


FOTO LA HORA: MIGUEL ROJO

José Mujica, ex dirigente de la guerrilla y Luis Lacalle el ex presidente liberal, ambos se perfilan como favoritos a protagonizar una campaña electoral polarizada.» title=»FOTO LA HORA: MIGUEL ROJO

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<p>Los uruguayos eligen en las internas de este domingo a sus candidatos para las elecciones presidenciales de octubre, con el ex dirigente de la guerrilla tupamara José Mujica y el liberal ex presidente Luis Lacalle favoritos a protagonizar una campaña que se anticipa polarizada.</p>
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Mujica, miembro de la coalición gobernante, es lí­der histórico del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, que actuó en Uruguay en los 60 y 70, responsable del secuestro y ejecución (agosto de 1970) del agente estadounidense del FBI Dan Mitrione.

Además, el MLN-T secuestró durante siete meses al agrónomo estadounidense Claude Fly y al diplomático brasileño Aloysio Dias Gomide (liberados en febrero de 1971), así­ como al embajador británico Geoffrey Jackson (entre enero y setiembre de 1971).

Mujica –que pasó preso en durí­simas condiciones durante la dictadura (1973-1985)– fue liberado y amnistiado con la restauración democrática, y se insertó en el sistema polí­tico.

El ex guerrillero ingresó a la coalición de izquierda Frente Amplio (FA) en 1989, y en 1994 fue electo legislador. Se erigió en lí­der del grupo mayoritario del FA, que llegó al actual gobierno en 2005, siendo ministro de Ganaderí­a.

En tanto, Lacalle, un abogado y productor agropecuario del Partido Nacional, ejerció la presidencia entre 1990 y 1995. En ese entonces intentó impulsar reformas liberales con desmonopolizaciones y privatizaciones, pero en 1992 chocó contra un plebiscito impulsado por los sindicatos y la izquierda.

Al finalizar su mandato hubo denuncias de corrupción, y la justicia procesó a algunos funcionarios de su gobierno, lo cual afectó su carrera polí­tica inmediata.

Los últimos sondeos, divulgados el jueves antes del comienzo de la veda proselitista, confirmaron la cómoda supremací­a de ambos candidatos en sus respectivos partidos. También marcan el predominio de Pedro Bordaberry (hijo del ex dictador Juan Bordaberry, procesado con prisión por violación a los derechos humanos) dentro del hoy minoritario Partido Colorado (PC).

Según la consultora Cifra, Mujica cosecha 59% en la interna del Frente Amplio, contra 31% de su rival Danilo Astori y 10% de Marcos Carámbula. Mientras, Equipos Mori les otorga 56%, 35% y 8% respectivamente.

En el PN, Cifra da 54% a Lacalle contra 41% para su contrincante Jorge Larrañaga, en tanto Equipos Mori les atribuye 57% y 41%.

En el PC, Cifra atribuye 67% a Bordaberry, contra 18% para el ex vicepresidente Luis Hierro y 14% para el diputado José Amorí­n. Equipos Mori da a Bordaberry 77%, contra 23% para «otros».

Si se confirman las previsiones, Mujica y Lacalle disputarí­an una polarizada campaña hasta las presidenciales del 25 de octubre.

«Va a haber un esfuerzo de los dos por no polarizar», porque «buena parte del electorado que define es de centro» y «los obliga a moderar sus discursos», dijo el analista Alfonso Lessa a la AFP.

Pero «no van a tener éxito, porque (…) va a ser difí­cl controlar a sus dirigentes» que luchan por escaños en el Parlamento, y la polarización va a ser «inevitable», agregó.

Por su parte, el politólogo Juan Carlos Doyenart estimó que si bien «representan modelos opuestos (…) las propuestas y discursos de Mujica y de Lacalle no son extremos».

«Lacalle es más de centro» y «Mujica más de centroizquierda» de lo que lo se quiere mostrar, señaló. Lo que «sí­ habrá es una polarización de estilos polí­ticos», pues «Mujica representa una ruptura con los viejos candidatos, es totalmente atí­pico» mientras «Lacalle es más formal y tradicional».