El último automóvil descapotable montado por el grupo alemán Karmann, en quiebra, salió de la cadena de montaje hoy, poniendo fin a una historia más que centenaria.
«Hoy, a las 11:35 horas locales, el último automóvil montado enteramente por Karmann salió de la cadena de montaje», indicó el grupo en un comunicado. Se trata del descapotable CLK del alemán Mercedes-Benz.
La empresa, cuya historia se remonta a 1901, ha construido más de 3,3 millones de descapotables a cuenta de otros constructores desde 1949, como el Karmann Ghias de Volkswagen, el Beetle, el Ford Escort, el Mercedes CLK y el Audi Cabrio.
Pero el reciente hundimiento de la demanda en el sector automotor supuso un duro golpe para la compañía, que centró sus actividades en la producción de autopartes para intentar mantenerse a flote. Karmann sigue empleando a unas 2.000 personas.
«No podíamos impedir el cese del montaje de vehículos, porque la estrategia de producción de los constructores automotores ha cambiado», explicó en el comunicado Ottmar Hermann, el administrador judicial.