Egipto demostrará «el robo» de Berlí­n


El busto de Nefertiti salió de Egipto en 1912, para hacer ensayos de policromí­a.

Egipto demostrará que el busto de Nefertiti, obra maestra del arte faraónico disputada por El Cairo y Berlí­n, donde se conserva, salió ilegalmente del paí­s, declaró el jefe de las antigí¼edades egipcias, Zahi Hawass.


«Estamos aún recabando informaciones, pero pronto pensamos tener las suficientes para presentar ante el Museo de Berlí­n una demanda formal de restitución del busto», declaró Zahi Hawass, al diario alemán Tagesspiegel.

Egipto pidió por primera vez la devolución del busto, de 3 mil 400 años de antigí¼edad, en la década de los 30, lo que los gobiernos alemanes sucesivos rechazaron.

«Aparentemente, no hay documentos que demuestren formalmente que Nefertiti salió de Egipto de forma legal y éticamente irreprochable. Pienso que tenemos buenos argumentos para su restitución», añadió.

Zahi Hawass amenazó con «no cooperar» con el Neues Museum de Berlí­n, que expondrá el busto en su apertura en octubre, mientras el problema no se solucione.

«Lo que nos han robado debe sernos devuelto, y eso incluye cinco obras únicas en nuestra cultura. Nefertiti es una de ellas», declaró Hawass.

Un diario británico escribió en febrero que, según un archivo alemán, a comienzos del siglo XX el célebre arqueólogo alemán Ludwig Borchardt habí­a engañado a un responsable egipcio para poder llevarse el busto a Alemania.

Según esa información, Borchardt envolvió el busto y lo colocó en una habitación escasamente iluminada para hacer creer al inspector que se trataba de un hallazgo sin importancia.

A comienzos de mayo, un conocido historiador del arte, Henri Stierlin, afirmó, incluso, que el busto fue esculpido en 1912 para hacer ensayos de policromí­a.